La prima de riesgo española sube hasta los 373 puntos básicos, desde los 359 de la víspera, tras la falta de un compromiso firme de los países emergentes para reforzar el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF).

La rentabilidad del bono español a diez años aumentó hasta el 5,557 %, mientras que el "bund" alemán cayó hasta el 1,822 %.

El bono italiano a diez años marcó durante la sesión una rentabilidad récord en el mercado secundario al situarse en el 6,4 % después de que se conociera que el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea (UE) supervisarán la puesta en marcha de las medidas exigidas al gobierno transalpino por parte de Bruselas.

El responsable de la mesa de deuda de Ahorro Corporación, Javier Ferrer, indicó que al bono italiano "no parece haberle sentado muy bien la noticia de la supervisión internacional", algo que según Ferrer se puede observar en la "escasa negociación que tuvieron los futuros del bono italiano" (apenas 8.000 contratos cerca del cierre de la sesión frente a los 1.400.000 contratos del bono alemán).

Además, Ferrer apuntó a que el BCE "habría comenzado a comprar deuda italiana durante la sesión" para evitar mayores repuntes.

La decepción de los inversores con los resultados de la cumbre del G20 afectaron a los diferenciales nacionales después de una semana en la que arrastraron la incertidumbre que generó en el mercado la propuesta de referéndum en Grecia.

La euforia tras la confirmación de que finalmente no se celebrará el referéndum y la bajada de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) daba paso a la decepción según se fueron conociendo las conclusiones de la cumbre.

Algunos de los resultados de la cumbre, como la autorización al FMI para dotarse con recursos de manera ilimitada, se vieron desplazados del primer plano de atención de los inversores que contemplaban con pesimismo la confirmación por parte de la canciller alemana, Angela Merkel, de que será difícil que países ajenos a la eurozona participen del fondo de rescate.

Las perspectivas de los analistas y los inversores respecto a un compromiso firme de países como Brasil o China para reforzar el fondo de estabilidad se veían truncadas con estas declaraciones.

La potenciación del FEEF fue uno de los compromisos de la cumbre del euro para que sirviese como cortafuegos con el fin de evitar el contagio a países como España o Italia.

Las dudas sobre como se financiará esa ampliación llevaron hoy a importantes repuntes a las primas de riesgo de los países periféricos: Grecia cerró la semana con su riesgo país en los 2.370 puntos, Portugal terminó en 973, Irlanda en 617 e Italia en 453, de nuevo en zona de máximos.