La Bolsa de Tokio cerró en positivo y cortó una racha de tres sesiones consecutivas de pérdidas, aupada por el optimismo del mercado por la renuncia Grecia a convocar un referéndum para aprobar las ayudas de Europa.

El selectivo Nikkei ganó 160,98 puntos, el 1,86 por ciento, y quedó en 8.801,40 puntos, mientras que el índice Topix, que agrupa a todos los valores de la primera sección, creció 13,44 puntos, el 1,82 por ciento, hasta 752,02 enteros.

Prácticamente la totalidad de los 33 sectores que forman el parque tokiota cerraron con ganancias, liderados respectivamente por el de maquinaria, el del caucho y el de las aseguradoras, mientras que el del gas y electricidad y el de las papeleras fueron los únicos que perdieron terreno.

La incertidumbre que pesaba con respecto a la crisis de deuda en la zona del euro disminuyó tras conocerse que el primer ministro griego, Yorgos Papandréu, no seguirá adelante con la consulta popular prevista para aprobar las medidas de ayuda de Europa.

"Las compras aumentaron en Tokio alentadas por las subidas en los mercados europeos y en Nueva York, ante las noticias sobre la renuncia de Grecia a los planes de referéndum y por el inesperado recorte de los tipos de interés del Banco Central Europeo", aseguró Hiroichi Nishi, analista de SMBC Nikko, a la agencia local Kyodo.

El parqué nipón avanzó gracias a la publicación de indicadores económicos mejores de lo esperado de Estados Unidos, y se contagió también de las ganancias en el resto de mercados asiáticos, especialmente el Kospi surcoreano o el Hang Seng de Hong Kong, que se apreciaron en más de un 3 por ciento.

Durante la jornada destacó el aumento de Nissan Motor, que se apreció un 4,9 por ciento, después de mejorar su previsión de cara a marzo de 2012, fecha en la que termina el año fiscal en Japón.

Por su parte, la textil nipona Fast Retailing perdió un 3,2 por ciento después de anunciar que las ventas de su firma internacional Uniqlo cayeron en octubre 4 por ciento interanual.

Asimismo, el gigante de la electrónica Sony cayó un 7,9 por ciento después de anunciar esta semana que espera terminar el presente año fiscal con una pérdida neta de 90.000 millones de yenes (unos 834 millones de euros).

En la primera sección ganaron terreno 1.262 valores, al tiempo que 286 terminaron con pérdidas y 114 lo hicieron en tablas.

El volumen de negociación fue de 1.671,40 millones de acciones, por debajo de los 1.767,20 millones de la previa.