La Bolsa de Tokio cayó hoy un 2,91 por ciento hasta su mínimo de las últimas cinco semanas, ante la creciente preocupación por la situación de Italia y el empeoramiento de la crisis de deuda en Europa.

El selectivo Nikkei cerró con una caída de 254,64 puntos, el 2,91 por ciento, y quedó en 8.500,8 puntos, mientras que el índice Topix, que agrupa a todos los valores de la primera sección, cayó 19,1 puntos, el 2,54 por ciento, hasta 730,3 enteros.

Los 33 sectores que forman el parqué nipón perdieron terreno, encabezados por el de la minería, el de las aseguradoras y el del caucho.

El mercado tokiota se dejó llevar por el aumento del rendimiento del bono italiano a diez años que superó el 7 por ciento, un nivel en el que Grecia, Irlanda y Portugal tuvieron que solicitar el rescate internacional.

"La constante venta de bonos italianos está creando un sentimiento de pesimismo en el mercado", aseguró Takashi Hiroki, analista de Monex Inc, en declaraciones a la agencia local Kyodo.

El mercado tokiota también se depreció arrastrado por las pronunciadas caídas en el resto de plazas asiáticas como Hong Kong, que caía por encima del 4 por ciento, o el Kospi surcoreano, que cedió casi un 5 por ciento.

En la jornada de hoy los inversores mostraron su nerviosismo por los problemas de deuda italiana, a la espera de que las autoridades transalpinas tomen medidas concretas para hacer frente a su déficit fiscal, añadió Kyodo.

La fortaleza de la moneda local con respecto al euro, con el que se intercambiaba hoy por debajo de la banda de los 105 yenes, perjudicó a algunos de los principales exportadores nipones, como Panasonic, que cayó un 3,6 por ciento, Toyota Motor, que perdió un 1,7 por ciento, y Sony, que se dejó un 4,7 por ciento.

Los valores financieros también se depreciaron entre el temor por la deuda italiana, con pérdidas como la de Nomura Holdings, que cedió un 3,1 por ciento, o el grupo Mitsui, que cayó un 4,7 por ciento.

El fabricante Olympus, que esta semana reconoció haber ocultado pérdidas por inversiones durante décadas, se desplomó por tercera jornada consecutiva, un 17,12 por ciento, después de anunciarse que es investigado por la Policía de Tokio, las autoridades bursátiles y la Agencia nipona de Servicios Financieros.

En la primera sección perdieron terreno 1.446 valores, frente a 147 que crecieron y 71 que permanecieron invariables.

En total cambiaron de manos 1.963,48 millones de acciones, por encima de los 1.800,42 millones de la víspera.