La empresa tabacalera World Wide Tobacco, creada hace 25 años y que desde hace 22 desarrolla su actividad en las instalaciones ubicadas en Benavente (Zamora), donde actualmente empleaba a 86 trabajadores entre fijos y fijos discontinuos, ha cerrado hoy sus puertas definitivamente.

El cierre se produce por la desaparición de las ayudas al tabaco y el fin del contrato de la empresa con la italiana Deltafina, a la que entregaba la producción, según han argumentado fuentes empresariales.

Las mismas fuentes han resaltado que a los trabajadores despedidos se les ha pagado la indemnización máxima, de 40 días por año trabajado.

El secretario provincial del sindicato Comisiones Obreras, Eugenio González, ha confirmado el pago de la máxima indemnización pero pese a ello ha lamentado el cierre de esta factoría por la pérdida de empleo que supone.

González ha recordado que la fábrica de tabaco de Benavente algunos años en plena campaña de procesado del tabaco ha llegado a tener más de 250 empleados, algunos de ellos contratados a través de empresas de trabajo temporal.

La World Wide Tobacco, que este año ha procesado cerca de 11 millones de kilos de tabaco, es propiedad desde el año 2006 de los empresarios Vicente Sánchez y Manuel Bermejo, que la adquirieron a la multinacional estadounidense Alliance Once Internacional, aunque el primero de estos empresarios también participó en la empresa en su puesta en marcha en el año 1986.

Vicente Sánchez ha enmarcado el cierre en la actual coyuntura que dificulta la venta de tabaco fuera por la fortaleza del euro y a la falta de ayudas al sector.

Además, la sociedad participada por la Junta de Castilla y León Sodical no accedió a prorrogar la devolución de las acciones que adquirió a la empresa hace cinco años para impulsar su continuidad.

El apoyo del Gobierno regional en 2006 fue clave para que Vicente Sánchez y Manuel Bermejo compraran la fábrica y mantuvieran la actividad, ya que inicialmente Alliance Once Internacional tenía intención de cerrar la factoría, lo que generó movilizaciones ciudadanas en Benavente que ahora, en plena crisis económica, no se han producido.