La persistente contracción del mercado del automóvil pone en peligro el mantenimiento de la red actual de concesionarios en Canarias. Los empresarios han adecuado su estructura a la situación económica, pero necesitan un cambio de signo en sus ventas para evitar cierres en 2012.

"No vale que las cosas vayan como este año. Hemos estado tan mal que ya no queda sitio donde recortar o ajustar. O se levanta cabeza o 2012 se prevé muy complicado para el subsector del automóvil en las Islas", señaló, en declaraciones a EL DÍA, el presidente de la patronal de concesionarios e importadores Fredica, Rafael Pombriego.

El subsector está "muy tocado por la crisis", reconoció, y recordó que el mismo representa, en conjunto, el 7% del Producto Interior Bruto en España, dato que en Canarias queda entre el 3% y 4%. "Merece, por tanto, un esfuerzo importante", apostilló Pombriego, que recalcó que "cualquier ayuda es poca" para reactivarlo.

El sentir de Fredica entronca con el de la asociación estatal de importadores Aniacam, que ayer publicó un informe sobre las previsiones de negocio del automóvil en 2012. El 33% de sus asociados considera que el subsector se encuentra en "caída libre", mientras que el 67% restante no espera mejoras el próximo año.

La encuesta de Aniacam es "un claro reflejo de la situación y los ánimos que hay entre los empresarios del automóvil, así como un termómetro del consumo en España", indicó la asociación en un comunicado.

El principal problema para reactivar el mercado siguen siendo las dificultades de los clientes para acceder a la financiación, según afirma en el informe un tercio de los encuestados.

Esta realidad, unida a la evolución de la economía, influye en que, a pesar de que las consultas a través de internet han crecido o se han mantenido, el tráfico de público en los concesionarios para comprar un automóvil haya bajado para el 78% de las empresas.

"Los clientes quieren renovar su vehículo y utilizan internet para informarse sobre los productos, pero las dificultades para obtener el crédito les echan atrás a la hora de acudir al concesionario", explicó en la nota el presidente de Aniacam, Germán López Madrid.

Este advirtió también de que la situación de los concesionarios "es aún más complicada", dado que al descenso de las ventas hay que añadir el descenso de la asistencia a los talleres.

El 89% de los puntos de venta señala que hay menos órdenes de reparación que hace un año y el 67% añade que, además, ha disminuido la facturación media en cada una de los trabajos.

El mercado de segunda mano es el único que se "salva" de la situación logrando, al menos, mantenerse. El 28% de los encuestados afirma que el tráfico de clientes en este segmento se mantiene y el 44% dice que se ha incrementado.

Para dinamizar las ventas, que en turismos han descendido casi un 13% hasta noviembre en Canarias respecto al mismo periodo de 2010, Fredica confía en la "sensibilidad" del nuevo ministro de Industria, José Manuel Soria.

La principal demanda de los vendedores es un plan de ayudas directas a los compradores, una iniciativa que ya dio "buenos" resultados en 2009 y 2010. También reclaman, añadió Pombriego, la supresión del impuesto de matriculación. "Puede ser una iniciativa importante para reavivar la industria y la distribución", destacó el presidente de Fredica.

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En el aire hasta 30.000 empleos

La asociación de vendedores de automóviles Ganvam ha alertado de que los empresarios tienen "serios temores" de que, si continúa la actual coyuntura de mercado, se produzca un nuevo recorte de 20.000 o 30.000 empleos en el subsector. Según esta patronal, el 80% de ese mercado lo componen firmas de pequeño y mediano tamaño. La crisis podría terminar cerrando 15.000 de ellas y destruyendo entre 60.000 y 70.000 puestos de trabajo. Antes del bache económico, los distribuidores sumaban 50.000 y sostenían 200.000 empleos.

Según Ganvam, los concesionarios, agentes de ventas y talleres ya no tienen "músculo financiero" después de soportar una crisis de cuatro años. Por ello, es imprescindible "una evolución macroeconómica al alza"; hasta que esta llegue, añaden, las ayudas constituirán una "buena alternativa". En el mismo sentido, Aniacam estima "de vital importancia" que el nuevo Gobierno "plantee de forma definitiva un plan estructural para apoyar a un subsector que representa una parte muy importante del PIB".

Un programa de rejuvenecimiento del parque automovilístico podría traer consigo alrededor de 100.000 ventas adicionales en España, "por lo que supondría un plan netamente rentable desde el punto de vista económico para el Ejecutivo", destacó ayer el titular de Aniacam.

Fredica confía en que el nuevo ministro de Industria "coja el toro por los cuernos" y consiga estimular el mercado, principalmente con un plan de ayudas al comprador que los empresarios reclaman desde que se extinguió el llamado 2000E y que ya José Manuel Soria secundó en las Islas con ayudas autonómicas.