El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, asegura que "se puede hablar" con las compañías eléctricas acerca de la posibilidad de que estas empresas asuman "una parte o no, de forma directa o indirecta", del déficit de tarifa del sistema eléctrico.

Este desajuste consiste en una deuda acumulada de 24.000 millones de euros que asumen los consumidores en su recibo de la luz y que se crea porque los ingresos de la tarifa no cubren los costes. Las eléctricas han ejercido de acreedores al asumir esta deuda en sus balances.

Durante su intervención en un almuerzo organizado por el Foro de la Nueva Economía, Soria recordó que "una parte del déficit está en el balance de las eléctricas y otra parte está titulizada", e insistió en que "la solución no la pueden asumir las operadoras en su conjunto".

Pese a señalar que la solución corresponde al Estado, a las eléctricas y al consumidor, advirtió de que "no se puede admitir que el déficit tarifario se convierta en un problema de déficit público", en alusión al limitado margen de la Administración para absorber esta deuda en sus presupuestos.

Soria intentará que la solución sea fruto del "máximo consenso y grado de acuerdo", pero si no es posible alcanzarlo, "el Gobierno no puede obviar su obligación de legislar y acabar con el déficit de tarifa".

Por otro lado, el ministro dijo que, pese a no compartir la medida, el recorte de primas aplicado por su antecesor en el cargo, Miguel Sebastián, a las primas fotovoltaicas fue "una decisión ajustada a Derecho". "Los servicios jurídicos no ven retroactividad en la norma. Cuestión distinta es que la medida se pueda compartir más o menos", afirmó.

GASOLINAS Y PETRÓLEO.

En cuanto a los récord históricos alcanzados por el precio de las gasolinas, el ministro consideró "deseable" que se detenga la escalada alcista en los precios, pero recordó que el Gobierno tiene un "escaso margen de maniobra" para regular los precios de la gasolina y que el único instrumento a su alcance es el de la fiscalidad.

Junto a esto, defendió las exploraciones de hidrocarburos en aguas canarias por parte de Repsol y consideró que "no tiene mucho fundamento" que se "infrautilicen fuentes de energía". "No conozco país en el mundo que renuncie unilateralmente a la explotación de hidrocarburos en aguas profundas", señaló.