La Confederación de Cuadros y Profesionales (CCP) ha rechazado la reforma laboral del PP, que califica como la más dura de la democracia, porque recorta derechos laborales, amenaza la conciliación familiar y abre el "más peligroso de los caminos" hacia el despido libre.

La organización sindical, que agrupa a mandos intermedios y directivos del sector privado, explica en un comunicado que el coste del despido no es el problema principal del mercado laboral, ya que con los costes que había hasta ahora se ha llegado a casi 5,3 millones de desempleados.

Asimismo, creen que la reforma estigmatiza de forma especial a los directivos del sector financiero, al impedir que los ejecutivos de banca expedientados perciban indemnizaciones.

En opinión de CCP, "gran parte de la culpa" de la crisis económica deriva de las cajas de ahorros, cuyas decisiones han sido tomadas por políticos de comunidades autónomas y ayuntamientos, y no por sus directivos.

Por otra parte, el sindicato considera que para que se genere empleo son necesarias medidas "realmente eficaces", como la disminución del coste del trabajo (reducción de cuotas a la Seguridad Social) para todas las nuevas contrataciones durante un tiempo limitado.

También apuesta por combatir más eficazmente la economía sumergida y el fraude fiscal, agravando las sanciones y penas para los defraudadores.

Además, entiende que es importante un cambio de mentalidad de una parte importante del empresariado "que busca el beneficio a cualquier precio".