El ministro de Agricultura de Marruecos, Aziz Akhannouch, aseguró ayer que no está en la intención de Rabat "destruir el valor de mercado" de las producciones españolas, sino impulsar un comercio beneficioso mutuo, y garantizó el cumplimiento de las normas aduaneras y fitosanitarias en la exportación a Europa.

Akhannouch se reunió ayer en la capital marroquí con su homólogo español, Miguel Arias Cañete. Ambos resaltaron la existencia de buenas relaciones bilaterales y el interés de llegar a acuerdos beneficiosos para ambos países, incluso en asuntos complejos como la agricultura o la pesca.

En una entrevista antes concedida antes del encuentro, Akhannouch resaltó que el acuerdo agrícola con la Unión Europea es una gran oportunidad para España, con la que Marruecos tiene una balanza comercial agraria deficitaria.

Respecto a las críticas al tratado, indicó que es un debate "falso" porque los productores marroquíes son conscientes de que hay que cuidar al mercado europeo sin romper los precios.

Por su parte, Arias Cañete apuntó que no se ha planteado pedir aún compensaciones a la Comisión Europea por posibles daños del acuerdo agrícola, hasta comprobar cuál será la evolución del tratado con datos "exactos y precisos", pero dejó claro que no iba a tener en cuenta "pronósticos catastrofistas" realizados por organizaciones agrarias.