Cajasiete ha obtenido un excedente neto, beneficio después de impuestos, de 3,3 millones de euros en 2011, que supone solamente una reducción del 5 por ciento con relación al año anterior.

La entidad informa en un comunicado de que ha realizado saneamientos por 13 millones de euros, un 10 por ciento más que el pasado año. El ratio de dudosidad se ha reducido un 1 por ciento y la cobertura con provisiones se ha incrementado, pasando del 53 por ciento hasta el 62 por ciento, muy por encima de la media del sector financiero.

En otro año difícil para el sector financiero, Cajasiete ha incrementado los depósitos del sector privado en un 5 por ciento y ha mantenido los créditos, habiéndose formalizado 6.600 nuevas operaciones de crédito por 245 millones de euros, mejorando su cuota de mercado.

La baja exposición de la entidad al sector inmobiliario, inferior al 4 por ciento, y la no existencia de financiación de suelo, son los factores que permiten a Cajasiete mantener su línea ascendente a pesar de la crisis económica.

Los recursos propios ascienden a 125 millones de euros, con un ratio de solvencia del 13,5 por ciento, muy por encima del 8 por ciento que le exige la normativa. El ''cuore capital'' es del 12,1 por ciento, dando la máxima calidad a los recursos propios, principalmente por sus elevadas reservas acumuladas.

Las nuevas necesidades de dotaciones para el saneamiento del sector financiero, establecidas en la reforma financiera aprobada recientemente, le suponen a Cajasiete únicamente 5 millones de euros, debido a la baja exposición al sector inmobiliario, y han quedado cubiertas en el primer trimestre de 2012 con cargo a su cuenta de resultados, al tener una gran estabilidad en el margen de intereses.

REFORMA FINANCIERA

Aunque la normativa establece como fecha límite para cumplir con las nuevas exigencias el 31 de diciembre de 2012, Cajasiete se anticipa y al 31 de Marzo tendrá cumplidas todas las nuevas exigencias de saneamientos recientemente aprobadas en la reforma financiera, adelantándose en nueve meses a las fechas exigidas.

Todo esto hace posible que Cajasiete mantenga la "canariedad" y continúe con su proyecto de expansión regional, apostando por el mercado financiero del archipiélago, manteniendo su "independencia" y consolidando su presencia en las siete islas.