El consejo de administración de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) ha propuesto fijar un impuesto de 0,07 euros por litro para la gasolina y el gasoil que permita recaudar 2.000 millones de euros anuales y utilizar este dinero para la financiación de las energías renovables.

Este gravamen elevaría del 48% al 52% la fiscalidad de la gasolina y del 43% al 46% la correspondiente al gasoil, aunque, según puntualizó, este tipo de tasas seguirían por debajo de la media comunitaria, en la que los impuestos pesan un 56% en el caso de la gasolina y un 48% en el del gasoil.

Déficit de tarifa

Esta medida, incluida en el informe de la CNE para solucionar el déficit de tarifa, parte de la idea de que el sistema eléctrico está haciendo un mayor esfuerzo, con un 38% de renovables en el futuro, para cumplir los compromisos medioambientales de la UE, mientras que los sectores energéticos dedicados al transporte apenas incorporan un 20% de "tecnologías verdes".

Por este motivo, aboga por que el coste del exceso de renovables en el mix eléctrico con respecto a los objetivos de la UE sea trasladado a otros sectores energéticos.

Según indica, en 2011 las renovables supusieron el 33% de la demanda de electricidad, 13 puntos por encima del objetivo para 2020, lo que supone un exceso del 39%, que es el que deberían asumir otros sectores. Como las primas tuvieron un coste de 5.500 millones, la CNE entiende que el 39% de este importe debe ser soportado por otros sectores energéticos.