La petrolera YPF, controlada por la española Repsol, negocia con Exxon Mobil un acuerdo para explotar petróleo y gas no convencional en el yacimiento de Vaca Muerta, en la provincia argentina de Neuquén, han dicho hoy fuentes de la compañía.

"No tenemos un acuerdo definitivo con Exxon. Estamos en negociaciones para explotar petróleo y gas no convencional en Vaca Muerta, pero no hay aun términos específicos para firmar un acuerdo", apuntaron las fuentes consultadas.

Las negociaciones comenzaron hace un par de años en el marco de los contactos de YPF con grandes petroleras en busca de socios para la explotación del yacimiento de Vaca Muerta en Neuquén, considerada una de las áreas de recursos no convencionales más importantes del mundo.

Las conversaciones entre YPF y la estadounidense Exxon se mantienen a pesar del enfrentamiento del Gobierno de la presidenta Cristina Fernández con la petrolera controlada por Repsol, a la que acusa de no invertir lo suficiente para garantizar el abastecimiento interno.

Por causa de ese enfrentamiento, autoridades regionales han retirado las licencias de explotación a YPF en diez áreas de seis provincias argentinas, entre ellas Neuquén.

El año pasado YPF anunció el hallazgo de petróleo y gas no convencionales en el yacimiento de Vaca Muerta, de donde en 2011 extrajo unos 700.000 barriles equivalentes de petróleo no convencional.

YPF ya ha incorporado a su inventario de reservas 116 millones de barriles equivalentes de petróleo de la formación Vaca Muerta.

Según evaluaciones de la auditora Ryder Scott, los recursos y las reservas en Vaca Muerta, en un área estudiada de unos 8.000 kilómetros cuadrados, ascienden a 22.807 millones de barriles equivalentes de petróleo.

De acuerdo a YPF, la explotación de las reservas de Vaca Muerta podría hacer que Argentina incrementara en un 50 por ciento su producción actual de petróleo, pero serían necesarias inversiones por 28.000 millones de dólares para la perforación de 2.000 pozos petroleros.

En el caso del gas, el desarrollo de Vaca Muerta también podría hacer que la producción argentina se incrementara en un 50 por ciento, con una inversión de unos 14.000 millones de dólares.