"Cuatro cafés más". Eso es lo que supone para los pensionistas la implantación del copado de medicamentos a juicio del consejero de Salud de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz. Sus declaraciones han sido muy criticadas desde el lado de la oposición, donde el PSOE ha tildado de "cruel" la comparación efectuada por el consejero castellano-manchego porque, según ha asegurado, "la medicina para un enfermo no es igual que un café".

Gobierno y Comunidades Autónomas acordaron este miércoles en el Consejo Interterritorial de Sanidad la reforma encaminada a implantar el copago farmacéutico que incluye, entre otros cambios, que los pensionistas paguen un 10% del precio de los medicamentos con receta hasta un máximo de 8 ó 18 euros al mes en función de su pensión.

Esta modificación del actual sistema de copago en medicamentos ha sido valorada este jueves por el consejero de Salud de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz, que ha defendido que es un mecanismo necesario en "unos momentos difíciles" para el sistema sanitario público, que "evita la introducción del copago en los servicios sanitarios".

"La gestión de los servicios sanitarios tienen graves problemas económicos para llegar a final de mes y con problemas para seguir prestando con normalidad los servicios sanitarios, no solo el farmacéutico", ha justificado en una entrevista a la COPE.

En este sentido, Echániz ha restado importancia a lo que supondría implantar el copago farmacéutico para quienes cobran una pensión. "Al pensionista que más le va a costar las medicinas al cabo del mes va a ser ocho euros, que son cuatro cafés, un café a la semana, 0,20 céntimos al día. Desde el punto de vista recaudatorio es una medida muy menor", ha explicado

Estas últimas palabras han sido muy criticadas desde el lado de la oposición, que este jueves ha centrado el debate del copago de los medicamentos en las declaraciones de Echániz.

UNA COMPARACIÓN "CRUEL Y MUY POCO INTELIGENTE"

Uno de lo más críticos ha sido el PSOE, que ve "cruel y muy poco inteligente" la comparación del consejero castellano-manchego porque, a su juicio, "la medicina para un enfermo no se parece para nada a un café o un traje".

Así lo ha asegurado en una entrevista en la Cope la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, que además ha pedido a Echánuz que tenga en cuenta que "la gente está seriamente preocupada con lo que está escuchando" y ha subrayado que a partir de ahora los pensionistas tendrán que pagar sus medicinas cuando, en la situación actual, "algunos están soportando la economía doméstica, haciéndose cargo de sus hijos y nietos".

Su compañera de partido, la exministra de Sanidad y diputada nacional por Alicante, Leire Pajín, también ha acusado al Gobierno central de "meter la tijera en el bolsillo de los ciudadanos" antes que recortar "el beneficio farmacéutico".

"Hay recorrido para tener una sanidad sostenible sin necesidad de que ningún ciudadano pague y, lo que es peor, han mentido, porque negaron una y otra que vez que aplicarían ningún tipo de repago y es lo que están haciendo", ha subrayado a los medios, a los que también les ha señalado que le "sorprenden" e "indignan" como "ciudadana" las nuevas medidas de ajuste.

Por otro lado, el portavoz de Sanidad de IU en el Congreso de los Diputados, Gaspar Llamazares, ha calificado de "monumento a la hipocresía" las explicaciones que está dando la titular de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, para justificar el copago farmacéutico.

"Dice la ministra que pone un repago farmacéutico para evitar que los ciudadanos tengan que pagar por la sanidad", ha explicado Llamazares en una rueda de prensa ofrecida en Oviedo, donde ha señalado que lo que realmente ha hecho el Gobierno es poner en marcha un impuesto "añadido".

IMPUESTO A LOS "DÉBILES"

Además, ha criticado que ese impuesto lo tengan que pagar los "débiles", aludiendo a los enfermos, los crónicos y los ancianos. "El Gobierno ha incumplido todos sus compromisos electorales", ha indicado Llamazares.

En contra de las críticas, la ministra de Sanidad ha defendido que la reforma anunciada "es justa y equitativa". "Ojalá no hubiéramos tenido que hacerla, pero la herencia que hemos recibido hace que sea inviable no hacerla", ha afirmado en declaraciones a Onda Cero.

Mato ha destacado que para el desarrollo de tal reforma ha primado la renta y se ha tenido en cuenta a los pensionistas, porque "el hecho de ser mayor hace que se utilicen más medicamentos", además de a los crónicos, que tienen también "más necesidad" de medicamentos. Asimismo, que "los mileuristas seguirán pagando lo mismo que hasta ahora".

"Garantizamos que la asistencia sanitaria siga siendo gratuita. Hemos tomado la decisión más justa, la que menos perjudica a los ciudadanos", ha destacado. El Gobierno, "al final, ha apretado las tuercas más a la eficiencia y a la eficacia de sistema sanitario y a las industrias que prestan los servicios que a los ciudadanos", ha agregado.

Por otra parte, Echániz cree que la puesta en marcha de los nuevos baremos va a ser "muy ágil y rápida". "Mañana la va a aprobar el Consejo de Ministros y entrará en vigor en cuanto se publique en el BOE. Las CCAA, con la llamada receta electrónica, la van a poder poner en marcha en muy poco tiempo", ha explicado.

Además, ha insistido en que "no tiene un afán recaudatorio sino disuasorio porque cada año se tiran a la basura 3.700 toneladas de medicamentos sin abrir"; y, en este ámbito, ha adelantado que el Gobierno obligará a los laboratorios a fabricar cajas con menos dosis, adecuadas a los tratamientos prescritos. ANDALUCÍA, CATALUÑA, PAÍS VASCO Y CANARIAS DICEN ''NO''

Andalucía, Cataluña, País Vasco y Canarias fueron las únicas Comunidades Autónomas que se opusieron a la implantación del copago en los medicamentos acordado en el pasado Consejo Interterritorial de Sanidad por el resto de autonomías.

Por un lado, la consejera andaluza de Salud en funciones, María Jesús Montero, ha asegurado este jueves que la Administración autonómica "tomará medidas" en el caso de que la contribución que tienen que hacer ahora los pensionistas se traduzca en un deterioro de su salud como consecuencia del abandono de los tratamientos por no poder asumir el abono de estos fármacos.

"Les digo a los pensionista andaluces que vamos a vigilar muy atentamente que su estado de salud no se vea perjudicado por esta medida" del Gobierno, ha recalcado en una entrevista en el programa ''Buenos días, Andalucía'' de Canal Sur Televisión.

Por su parte, el portavoz del Govern catalán, Francesc Homs, ha anunciado que Catalunya mantendrá la tasa de un euro por receta que aprobó en el mes de marzo el Parlament, aunque el Gobierno aumente el sistema de copago farmacéutico vigente hasta la fecha.

"Mantendremos el euro por receta mal que nos pese. Como máximo esto puede representar 60 euros al año por persona. Está planteado con la finalidad de moderar el abuso del consumo que todos sabemos que existe en productos farmacéuticos", ha sentenciado en rueda de prensa en la Generalitat.

Mientras tanto, la consejera de Educación, Isabel Celaá, ha denunciado que el Gobierno de Mariano Rajoy pretende, "por la vía de los hechos", llegar a la devolución de competencias en materia educativa. Además, Celaá ha advertido de que el Gobierno vasco no tolerará "la vulneración" del autogobierno que, a su juicio, suponen las medidas del PP que "merman calidad en el sistema educativo".

Desde Canarias, la consejera de Sanidad del Gobierno autonómico, Brígida Mendoza, ha insistido este jueves en que con el copago se rompe la equidad en sanidad, independientemente de que se hable de rentas altas, medias o bajas.