El cierre del diario la Voz de Asturias, anunciado ayer, es uno más en la extensa lista de medios de comunicación que se han visto obligados a cesar en su actividad desde el comienzo de la crisis.

Según los datos del Observatorio Profesional de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), 6.208 periodistas han perdido su puesto de trabajo en España a consecuencia de los cierres o recortes de plantilla en medios de comunicación desde noviembre de 2008.

Uno de los últimos medios afectados fue el diario de distribución nacional "Público", editado, al igual que "La Voz de Asturias", por Mediapubli, que publicó su último número en papel el pasado 24 de febrero.

"Público", que mantiene todavía la web (el plazo para venderla acaba en mayo), presentó la solicitud de "concurso de acreedores" el 3 de enero de 2012.

También los diarios gratuitos se han visto afectados por la crisis, debido a la caída de la publicidad.

El 23 de diciembre de 2011 dejó de publicarse "ADN", lanzado por Editorial Página Cero y que contaba entre sus accionistas de referencia con el grupo editorial Planeta. La edición digital había cerrado en enero de 2009.

La misma suerte corrió "Metro Directo", el diario gratuito del grupo multinacional sueco Metro International SA., que se distribuía en 42 provincias y que cerró el 30 de enero de 2009.

La prensa regional se ha visto muy afectada por la crisis. Entre los diarios que dejaron de publicarse están la Tribuna de Salamanca, (su último número se publicó el 12 de abril de 2011); el Xornal de Galicia (septiembre de 2011); el Faro de Murcia (julio 2010) o "La Voz de Jerez", cuyo cierre se anunció el pasado día 10.

Tampoco se han librado de la crisis revistas con décadas de historia a sus espaldas. Es el caso de la publicación quincenal musical "Súperpop", que comenzó a editarse en 1977 y que en mayo del pasado año suspendió su edición en papel, aunque aún sigue en internet.

"Don Balón", revista semanal dedicada al mundo del fútbol, acabó el pasado mes de septiembre una trayectoria que había comenzado en 1975.

El periódico "Segunda mano" abandonó su cita con los kioskos en noviembre de 2008, después de treinta años, aunque se mantuvo en internet.

La revista mensual gay "Zero" editó su último número en noviembre de 2009, después de declararse en concurso de acreedores. Había comenzado a publicarse en 1998.

La editora de revisas MC Ediciones, en concurso de acreedores, cerró 66 de sus 76 cabeceras, y Globus Comunicación, dedicada igualmente a la edición de revistas, también se ha declarado en concurso de acreedores.

Fax Press, agencia de noticias fundada en los años ochenta por el periodista Manu Leguineche y que en 2001 pasó a la propiedad del grupo Intereconomía Corporación, dejó de funcionar en septiembre de 2009.

No es mejor el panorama entre los medios audiovisuales.

En noviembre de 2008 cerró Localia, propiedad del grupo Prisa, y que contaba con un centenar de emisoras en las principales ciudades españolas.

En marzo de 2009 dejó de emitir Bloomberg TV España, creada en 1997.

Otra emisora participada por Prisa, CNN, salió al aire por última vez el 31 de diciembre de 2010, tras once años en antena.

Veo7, proyecto televisivo de Unidad Editorial, realizó su última emisión el 30 de junio de 2011 (había comenzado en 2005, con la llegada de la TDT).

La crisis tampoco ha sido ajena a algunos de los medios nacidos con vocación exclusivamente digital.

El portal "Soitu.es" anunció su cierre el 22 de octubre de 2009, tras 22 meses de actividad. "Factual" cerró el 10 de julio de 2010, sólo ocho meses después de su nacimiento.

Además de los múltiples cierres de medios, la práctica totalidad de los que sobreviven han aprobado expedientes de regulación de empleo y han reducido sus plantillas y algunos han suprimido ediciones regionales, como el diario "El Mundo", que el mes pasado cerró las delegaciones de León y de Galicia.

En lo que va de año, sólo en la Comunidad de Madrid, según datos de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), 265 periodistas han sido despedidos y doce han sido reubicados en otros puestos de trabajo.