Los secretarios generales de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez, han asegurado hoy que la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha declinado abrir con ellos un proceso de negociación sobre las reformas aprobadas por el Gobierno.

Los dirigentes sindicales han hecho estas declaraciones en una rueda de prensa en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, donde la titular del departamento, Fátima Báñez, se ha reunido con ellos por primera vez tras la huelga general que convocaron el pasado 29 de marzo contra la reforma laboral.

Tras dos horas de reunión, Méndez ha lamentado que no "haya tenido eco" y haya quedado en "vía muerta" la demanda sindical para llegar a un gran acuerdo para el empleo y el crecimiento y la preservación del los derechos sociales.

Toxo ha lamentado que se "desprecie" su propuesta sindical y ha dicho que el Gobierno ha confirmado hoy que "confía en sus propias fuerzas y rechaza la oferta de cooperación de las organizaciones sindicales".

Al respecto, ha añadido que ante una "situación excepcional" es necesario que existan otros agentes además del Gobierno para "afrontar la situación desde un consenso fuerte con los actores económicos y las fuerzas sindicales"

Toxo ha sido tajante a la hora de señalar que "no estamos ante una recomposición del diálogo social", si bien ha apuntado que no se sabe si mejorará el tono de las conversaciones en el futuro.

Según el líder de CCOO, la falta de una respuesta positiva por parte del Gobierno hace que las manifestaciones convocadas para el 29 de abril se mantengan "con mayor necesidad de que tengan un seguimiento masivo".

No obstante, ante la posibilidad de incrementar las movilizaciones, ha señalado que "no hay razones" para cambiar la agenda que los sindicatos han definido.

Por su parte, Méndez ha subrayado que el problema no está en que el Gobierno quiera reconocer el impacto de la huelga del 29 de marzo o de las manifestaciones, sino en que está "obcecado" y "se le ha metido entre ceja y ceja que hay que aplicar la doctrina del shock y las políticas de recorte".

Ha destacado que los sindicatos no se sienten decepcionados después del encuentro, ya que "se siente decepcionado aquel que tiene expectativas" y los sindicatos no las tenían.

Ha insistido en que el Gobierno no puede "regatear" la representación democrática de los sindicatos que, según él, tienen derecho a participar en los mecanismos de información, consulta y diálogo.

Por este motivo, ambos líderes han coincidido en que volverán a hablar con el Gobierno cuando les llame, como según ellos les ha indicado hoy la ministra.

Con respecto a las posibles modificaciones de la reforma laboral, Toxo ha dicho que Báñez les ha comunicado que no se modificarán cuestiones fundamentales y que les ha remitido al proceso de tramitación y debate de las enmiendas.

Ha añadido que resulta contradictorio que la ministra valore la trascendencia y los contenidos del acuerdo suscrito por los sindicatos y la patronal el 25 de enero a la vez que la reforma laboral "invade" los aspectos pactados.