El ex delegado de la Agencia Tributaria en Santa Cruz de Tenerife Domingo Velasco cree que el REF no ha cumplido las expectativas y uno de sus grandes problemas es que no ha logrado diversificar la economía canaria, pues la inversión se ha dirigido hacia los sectores en los que la rentabilidad era mayor en el menor tiempo posible, como la compraventa de inmuebles.

Así lo indica Domingo Velasco en una entrevista en la que señala que Canarias ha desaprovechado los años que el Régimen Económico y Fiscal (REF) lleva en vigor, cuyo objetivo era el de mejorar el nivel de vida del archipiélago hasta acercar las islas a la media nacional, y prueba de ello es que tiene la mayor tasa de paro, los sueldos más bajos del país y el PIB estancado, en el mejor de los casos, y en estos momentos a la baja.

Domingo Velasco indica que las reformas del REF siempre han sido "a machamartillo" porque han intentado, en el mejor de los escenarios, mejorar algo que se había "quedado corto".

El origen de las cortapisas deriva de que la UE no iba a permitir que un territorio comunitario determinado "se desmadrase" permitiendo una serie de beneficios fiscales que podrían provocar la deslocalización de empresas de otras zonas.

Como ejemplo, la ZEC nació con una pretensión amplia de ser un territorio "off shore" de atracción de capitales y empresas, con importantes incentivos financieros y fiscales.

El final de la historia fue una regulación normativa comunitaria estrecha con muy poco margen de maniobra, por lo que finalmente "se convirtió en una cosa que apenas tiene utilidad".

"Fueron tantos los recortes en la tramitación del REF en general y de la ZEC en particular, que la dejaron en los mínimos", explica Velasco, y tampoco las zonas francas "terminan de arrancar" porque no se ha sabido darles el suficiente atractivo para que las empresas se instalen en ellas, ni utilicen los incentivos de forma debida.

Pero además, prosigue el experto, la ley del REF no sólo contempla incentivos fiscales, sino económicos, y buena parte de los contemplados en el texto legal, siguen sin desarrollarse.

Entre estos incentivos económicos figuran los relacionados con el turismo y los que afectaban a las inversiones públicas, donde a su juicio se observan "incumplimientos notorios", como los de dirigir las inversiones a sectores estratégicos.

En opinión de este especialista, el REF sólo se ha desarrollado fundamentalmente en la parte relacionada con el pago de impuestos y una de sus principales herramientas, la Reserva de Inversiones de Canarias (RIC), no se ha regulado todo lo bien que se debió y al final se ha utilizado principalmente como un instrumento recaudatorio.

Sin embargo, precisa Domingo Velasco, los instrumentos del REF han logrado algunos objetivos, que si bien no han sido notables, sí que han permitido, aunque sea en parte, la capitalización de las empresas, la ampliación de plantillas, la inversión en nuevas tecnologías y la formación de trabajadores, si bien, todavía lejos de lo deseado.

Apunta que una de las perspectivas más interesantes para la materialización de la RIC sería la de su utilización en el campo de la rehabilitación y renovación de la planta alojativa turística obsoleta entre otros objetivos, explica, porque la política tributaria debe ser dirigida hacia los sectores estratégicos de la economía canaria en los que el valor añadido aportado fuera notorio y necesario.

Asimismo, los incentivos fiscales canarios deberían apoyar proyectos empresariales creativos en sectores como el turismo, la investigación, el desarrollo y la innovación y convertir a Canarias en una gran plataforma logística, que ofrezca a los países de todo el mundo de mayor crecimiento y exportadores de capital el territorio canario como garante de la seguridad jurídica requerida y plataforma de sus empresas en África.

Además, detalla Velasco que el futuro pasará también por que se desarrolle un verdadero plan estratégico del turismo de Canarias, dando cabida en su decisión final a todos los agentes implicados y tener claro los mercados a conquistar y las estrategias para llevarlos a cabo.

Considera además poco coherente que no existan políticas integradas entre todas las islas del archipiélago a la hora de promover en su territorio el desarrollo de polígonos industriales o tecnológicos, nudos de comunicaciones, red de transportes y planes de tratamiento de residuos sólidos, entre otros, ya que son sectores estratégicos de todo Canarias y en los cuales deben participar todas las islas, y lo contrario implica que "algo falla".

Domingo Velasco señala además que a pesar del avance registrado por Canarias en los últimos veinte años, previsiblemente las islas han vuelto a ser en la práctica región objetivo 1, condición que ya había perdido al situarse por encima del 75 por ciento de la renta per cápita europea, pero que si de hecho no es reconocida, conlleva la pérdida de importantes ayudas comunitarias.