La Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI) calculó ayer que los clientes de las rebajas de verano, que empiezan mañana, se reducirán este año un 20%, pero subirá lo que gasten aquellos que compren, como ocurrirá en Canarias, donde el gasto medio estará en 46 euros, 4 euros más que en 2011.

Son conclusiones de una encuesta efectuada por esta organización entre 1.500 consumidores entre finales de mayo y primeros de junio. El 70% de los preguntados aseguran que comprarán en estas rebajas, y gastarán un media de 60 euros, cuando eran 50 hace un año, lo que significa un aumento del 20%.

"Hay una parte muy importante de la población que no tiene dinero para comprar ropa y calzado, ni siquiera en rebajas, debido a que la crisis económica les está asfixiando, mientras que otros han decidido esperar a las rebajas para aprovechar los descuentos", según explicó el titular de FUCI, Gustavo Samayoa.

Las rebajan arrancan mañana en las Islas con descuentos que alcanzarán el 70%, prolongándose hasta el 1 de septiembre.

Ropa y complementos seguirán siendo los productos más demandados y pierden ventas los artículos de tecnología y mobiliarios.

Grandes superficies y comerciantes afrontan esta campaña con "moderado optimismo" y confían en elevar su facturación

La Confederación Española de Comercio prevé que se superen las ventas de 2011, que a nivel estatal llegaron a 3.300 millones.