La reforma de la ley de dependencia, aprobada hoy por el Consejo de Ministros, fomentará los cuidados profesionales de los dependientes sobre los familiares, a los que bajarán un 15 por ciento la paga.

La reforma, según el Ejecutivo, generará puestos de trabajo y servirá para proteger a los grandes dependientes.

Además la modificación aprobada hoy pedirá a los cuidadores familiares unos conocimientos mínimos para concederles esa asignación con el fin de dar prioridad a los cuidados profesionales.

A su vez la norma a la que ha dado luz verde el Consejo, simplifica el sistema en tres grados de dependencia (de los actuales seis) y establece la ampliación de la ayuda por asistente personal para todos los grados de Dependencia.

Por otro lado, se revisará el modelo de cotizaciones de los cuidadores no profesionales en el entorno familiar y se amplía a dos años el plazo para que las personas que aún no tienen reconocido el grado de dependencia, o no perciben la prestación, reciban dicha cuantía.