La inflación interanual subió tres décimas en julio y se situó en el 2,2%, su nivel más elevado en lo que va de año, debido, sobre todo, al encarecimiento de los medicamentos y de otros productos farmacéuticos, según se desprende del indicador adelantado del índice de precios de consumo (IPC) publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La inflación interanual en julio (últimos doce meses), es la más elevada desde diciembre de 2011, cuando llegó al 2,4%.

El INE achaca la subida de la inflación al encarecimiento de los medicamentos como consecuencia de la entrada en vigor en julio del nuevo modelo de copago de las recetas de la sanidad pública. Aunque el precio total de los fármacos sea el mismo, el IPC recoge la subida del coste que tiene que asumir el usuario final.

La medida aprobada por el Gobierno establece por primera vez el pago de fármacos para los pensionistas a partir de cierto nivel de ingresos y eleva el porcentaje que pagaban hasta ahora los trabajadores del sector privado en función de su nivel adquisitivo.

No obstante, según declaraciones a Efe del economista del Instituto de Estudios Económicos (IEE) Pablo Almagro, las farmacéuticas están teniendo algún problema de impago y, "a lo mejor", han tenido que hacer un ajuste vía precio en los medicamentos que no se pueden comprar con recetas.

En su opinión, el dato de julio "no se esperaba tan alto", ya que se trata de un periodo de rebajas en el que suelen descender los precios del calzado y de los textiles.

Para explicar el repunte del IPC, Almagro añadió el encarecimiento de los medicamentos el aumento de los precios de los carburantes e hidrocarburos, así como a las subidas de la luz que se han ido produciendo.

Según ha indicó, el aumento de tres décimas en el IPC en un contexto de recesión económica refleja "tensiones inflacionistas", un hecho que ha considerado "bastante preocupante".

En lo que se refiere al impacto de la subida del IVA, que entrará en vigor el 1 de septiembre, las previsiones de los centros de estudios señalan que ésta no se trasladará totalmente a los precios, sino que repercutirá de forma parcial, como ya lo hizo tras la subida del gravamen indirecto en 2010.

Así, el instituto Flores de Lemus, de la Universidad Carlos III de Madrid, estima en su último boletín que sólo una tercera parte de la subida del IVA se trasladará a los precios.

De este modo, el IPC interanual se elevaría hasta el 2,8% en septiembre, una cifra que coincidiría con la del cierre de 2012.

Flores de Lemus resaltó que la tendencia actual de la inflación interanual es de "muy ligera moderación", por lo que una variación "exógena", como la subida del IVA, se apreciará "claramente".

En esta línea, la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) apunta a que la traslación del aumento del IVA al IPC será "algo menor" que la que se produjo en 2010, ya que actualmente la demanda es más débil.

La previsión de las cajas para el cierre de año es que la inflación interanual se sitúe en el 2,5 %.

Si el dato publicado hoy se confirma -el resultado definitivo se conocerá el 14 de agosto- se rompería la tendencia estable de mayo y junio, cuando la inflación interanual se mantuvo en el 1,9 %, al tiempo que se superaría el 2,1% alcanzado en abril por el encarecimiento de la electricidad.

En otro contexto, el INE confirmó ayer el agravamiento de la recesión y explicó que es consecuencia de una aportación más negativa de la demanda nacional, compensada parcialmente por la contribución positiva de la demanda exterior.

Esto significa que el sector exterior -que incluye las exportaciones e importaciones- ha sido el único que ha crecido, mientras que el consumo de las familias, el gasto de las administraciones públicas y la inversión empresarial y en construcción se han deteriorado aún más.