La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, ha defendido hoy que España tiene que "evitar el rescate hasta el último minuto" y ha opinado que "a lo mejor" hay que "plantarse en Bruselas" para decir que el país no puede seguir así.
"Una vez que has hecho eso y, si al final no lo consigues, al menos lo habrás intentado, habrás ejercido soberanía y habrás defendido a tu país", ha dicho la dirigente socialista en Santander, donde se ha reunido con responsables del PSOE de Cantabria para hablar sobre los recortes en educación.
Valenciano cree que el Gobierno está "negociando bajo cuerda un segundo rescate", porque considera que así lo ha manifestado "claramente" el ministro de Economía, Luis de Guindos, en el "Herald Tribune" que es, junto al "Financial Times", lo que, en su opinión, los españoles tendrían que leer para enterarse de las intenciones del Ejecutivo.
Según la vicesecretaria general del PSOE, esos ajustes adicionales llegarán cuando todavía no se ha explicado el primer rescate, que era "un rescate sin rescate, una financiación sin condicionalidad". "Y fíjense si llevamos condicionalidades del famoso rescate financiero", ha añadido.
Además ha afirmado que España lleva "meses y meses" generando dudas "sobre todo el mundo", produciendo noticias negativas en el contexto internacional, como ha ocurrido con el rescate a Cataluña, una medida que, a su juicio, significará más recortes en esa comunidad autónoma.
"Estamos produciendo noticias negativas en un país que tiene que ser rescatado y que, a su vez, tiene que rescatar a sus comunidades. Es un camino al desastre y al abismo", ha advertido.
Valenciano ha insistido en que hay que romper "el circulo vicioso" de unas políticas que, según los socialistas, están llevando a las familias y al país en su conjunto a un empobrecimiento vertiginoso.
Ha subrayado asimismo que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debería ser el abanderado en Bruselas de políticas que favorezcan el crecimiento y ha hecho hincapié en que hay que relajar el objetivo de déficit porque España "no puede ir tan rápido".
"No importa mucho un año más. Es mejor tardar un año más que someter a este país a la presión a la que se le está sometiendo", ha afirmado.