El estigma de recibir ayuda pública planea sobre tres grupos bancarios españoles, Banco Popular, BMN e Ibercaja, que solo cuentan con dos semanas para convencer a las autoridades de que pueden recapitalizarse por sí solos.

El Banco de España explicó ayer, en una conferencia con analistas, que no se decidirá si estos grupos son forzados a recibir ayuda pública hasta que presenten sus planes de recapitalización, para lo que tienen hasta el 15 de octubre.

Solo entonces -explicó Ramón Quintana, del departamento de Supervisión del Banco de España- se verá si sus necesidades de capital son mayores que el 2% de sus activos ponderados por riesgo, lo que los obligaría a recibir un préstamo público mediante la emisión de los llamados CoCos (bonos contingentes convertibles).

Asimismo, hay que destacar que la entidad deberá emitirlos antes de que acabe el año.