España reanuda este jueves las emisiones de deuda con tres emisiones de bonos con las que espera captar hasta 4.000 millones de euros, las primeras de un mes en el que el Tesoro debe hacer frente a vencimientos por un importe que roza los 30.000 millones de euros, la mayor cifra mensual de todo el año.

La emisión del jueves, de bonos con vencimiento en 2014, 2015 y 2017, es la primera tras conocerse las necesidades de capital de la banca española y los detalles de los presupuestos generales del Estado para 2013.

Los analistas consideran que la publicación de las necesidades de capital de la banca española que publicó el viernes la consultora Oliver Wyman, 53.700 millones de euros, deberían suponer un factor de estabilidad, aunque algunas voces señalan que esta cifra se queda corta.

En concreto, la agencia de medición de riesgos Moody''s, que debería revisar en las próximas horas la calificación del reino de España, ha elevado hoy estas previsiones hasta 70.000 millones, o incluso 105.000 en el peor de los contextos posibles.

El departamento de análisis de Bankinter sitúa la amenaza de Moody''s como el principal foco de tensión para España esta semana.

Además, recuerdan que pese a que los presupuestos generales de 2013 contemplan el cumplimiento del objetivo de déficit del 4,5 % del PIB, la solicitud de asistencia financiera a la UE continúa siendo una incógnita.

Según el Ministerio de Economía, el calendario de financiación del Tesoro sigue ejecutándose sin especiales tensiones, ya que hasta la fecha se ha colocado el 83,4 % de lo previsto para todo el año en deuda a medio y largo plazo, dentro del programa de financiación regular.

La última emisión de deuda del Tesoro español, de letras a tres y seis meses, se saldó con la colocación de un importe algo menor del previsto y una ligera subida de la rentabilidad.

Los expertos dieron por buena la emisión puesto que se trataba de una subasta "de trámite" antes de las que tiene previsto celebrar el Tesoro este mes, a la espera de que el Banco Central Europeo (BCE) concrete su programa compras de deuda soberana en el mercado secundario.

Estas compras, que el presidente del organismo anunció a comienzos de septiembre, no se han materializado aún, con lo que la entidad lleva 28 semanas consecutivas sin comprar deuda.