Las principales entidades financieras españolas, en medio de un fuerte proceso de saneamiento inmobiliario, están compensando este impacto con un aumento de las comisiones que cobran a los clientes y que les han supuesto unos ingresos de 14.075 millones hasta septiembre, lo que implica un repunte interanual del 2,7%, según reflejan sus propios datos que fueron difundidos ayer.

En el caso del Banco Popular, la entidad ha cobrado unas comisiones netas de 601,4 millones de euros, lo que supone un incremento del 16,8%.

CaixaBank ha incrementado los ingresos por comisiones netas hasta 1.268 millones, el 11,5% más que los 1.137 millones de hace un año, por el "aumento de la actividad comercial".

En el caso de BBVA, las comisiones netas de los nueve primeros meses alcanzan 3.690 millones de euros, el 7,8 % más que los 3.424 millones de un año antes.

Por el contrario, Bankia y Santander han reducido las comisiones totales netas.

Hasta septiembre, las comisiones netas de Bankia alcanzaron 750 millones de euros, frente a los 807 de hace un año, lo que supone una caída del 7,1% (datos proforma) Mientras, el Santander ingresó por sus comisiones netas 7.766 millones de euros, lo que se traduce en una caída del 0,7%.