La ministra de Empleo, Fátima Báñez, explicó ayer que el Gobierno ha decidido congelar en 2014 el salario mínimo interprofesional (SMI) "por el bien de todos", ya que la moderación salarial ha permitido mejorar la competitividad de España y mantener puestos de trabajo.

Así se expresó en respuesta al diputado socialista, Jesús Caldera, durante la sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso de los Diputados, en el que éste le acusó de adoptar esta medida para favorecer a los ciudadanos con mayores rentas.

Báñez señaló que el Gobierno sólo ha aplicado "con responsabilidad" el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores, en el que se determina que las actualizaciones del SMI deben realizarse atendiendo al IPC de cada año, a la productividad media nacional, a la participación del trabajo en el PIB y a la situación económica.