El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, anunció hoy un programa de inversiones por valor de 10.000 millones de euros, que deberá ser culminado en 2018.

Schäuble hizo el anuncio durante la conferencia de prensa sobre la recaudación fiscal, en la que dijo que para ello no será necesario contraer nuevas deudas.

Los planes anunciados son una reacción al enturbiamiento de la coyuntura que llevó al gobierno alemán a revisar a la baja sus pronósticos de crecimiento y también hoy sus previsiones de recaudación fiscal.

Schäuble dijo que el plan ha sido acordado con la canciller, Angela Merkel, y el ministro de Economía, Sigmar Gabriel.

Hasta 2018 los presupuestos públicos alemanes contarán con 21.000 millones de euros menos de lo presupuestado hasta ahora. Sólo para el año próximo la previsión de recaudación fiscal se redujo en 6.400 millones de euros.

Sin embargo, el presupuesto federal no se verá excesivamente afectado y sólo tendrá una merma de 500 millones de euros, con respecto al pronóstico de mayo, lo que es importante para los planes de lograr un presupuesto equilibrado.

Pese a la corrección a la baja de los pronósticos, la recaudación fiscal subirá con respecto a años anteriores.

Así, se espera que, después de los 640.900 millones de este año, en 2019 la recaudación alcance los 760.300 millones.

Según Schäuble, la coalición de gobierno ha creado un margen de maniobra que le permite dedicar a las inversiones los 10.000 millones manteniendo una estricta disciplina de gasto.

El presidente de la Confederación de la Industria Alemania (BDI), Ulrich Grillo, celebró el anuncio.

"Es acertado que el gobierno quiera usar el margen que tiene para impulsar las inversiones. Es una buena señal para una política de consolidación a largo plazo", dijo Grillo.

"Se trata de algo que le da confianza a los inversores privados", agregó.

La Federación de la Industria de la Construcción también celebró el anuncio y su gerente, Michael Knipper, dijo que había llegado en el momento correcto.

"El sector de la construcción celebra que el gobierno tome en cuanta las preocupaciones de la industria y en especial del sector de la construcción y esté decidido a combatir el déficit de inversiones", dijo Knipper.