Los concesionarios de China, el mayor mercado mundial del sector, vendieron 1,99 millones de automóviles en el mes de abril, un descenso del 11 por ciento con respecto a marzo y del 0,5 por ciento con respecto al mismo mes del año pasado, informaron hoy fuentes sectoriales.

Según las cifras que periódicamente publica la estatal Asociación China de Fabricantes de Automóviles, en el acumulado del año las ventas alcanzaron los 8,14 millones de unidades, un ascenso interanual del 2,8 por ciento.

En marzo las ventas habían cosechado un aumento interanual del 3,3 por ciento, mientras que en febrero se había registrado un descenso del 0,2 por cien, reflejo del momento inestable en el sector, en medio de un momento de ralentización en la economía china.

En el cuarto mes del año se produjeron 2,08 millones de unidades, un descenso del 8,9 por ciento respecto a marzo (pero un ascenso del 0,6 por cien frente a abril de 2014), mientras que en el acumulado del año se han fabricado 8,28 millones de unidades, un alza interanual del 4,1 por cien.

Los analistas opinan que los altibajos en el sector no sólo son reflejo de las cifras macroeconómicas generales de China (que en 2014 tuvo su ritmo más bajo de crecimiento del PIB en 24 años) sino también en la limitación de nuevas matriculaciones en grandes ciudades como Pekín, con el fin de reducir la polución.

Otro factor a considerar es la lucha anticorrupción, que ha golpeado con especial fuerza a los vehículos de lujo.

Las marcas alemanas, encabezadas por Volkswagen, son las que tienen una mayor cuota de mercado en China (18,6 por cien), seguidas de Japón (16,5 %), la propia China (14,3 %) y EEUU (10,8 %), según las estadísticas mensuales conocidas hoy.

Las ventas de automóviles en China alcanzaron en 2014 las 23,49 millones unidades, un alza interanual del 6,9 por ciento respecto a 2013 y un nuevo récord que volvió a consolidar a este país como el mayor mercado nacional del motor de todo el mundo por número de vehículos vendidos.