El años 2016 está siendo un buen año para el crédito, algo que no ocurría desde 2010 y que lleva consigo una

La economía española está acostumbrada a este crecimiento del crédito pues así lo hemos visto durante 46 años seguidos. Desde 1962 el Banco de España solo había dado datos positivos, pero con la llegada de la crisis se produjo una reducción de este dato que ha hecho que la financiación a empresas y familias hayan caído casi la mitad del producto interior bruto.

La bajada de tipos de interés y la mejora de la economía están detrás de este aumento del crédito. También está la aparición en el mercado de la posibilidad de contratar microcréditos rápidos y microprestamos que han permitido a las familias conseguir dinero rápido sin dar demasiadas explicaciones.

La situación actual frena la preocupación de economistas y expertos en finanzas por el apalancamiento financieros. Países como Japón han vivido durante años este problema, que junto a la trampa del ahorro, ha impedido a la economía nipona crecer durante décadas.

Es verdad que el crecimiento todavía no es elevado ni fuerte, cambios en la economía recientes podrían volver a contraer este crédito y frenar el crecimiento del mismo. Las medidas que tomará la Unión Europea por el incumplimiento del déficit y los resultados de las elecciones generales del próximo junio, así como las medidas que tome el ganador, podrán ser claves para el desarrollo de estas cifras macroeconómcias.

En un país que todavía tiene un desempleo por encima del 20%, es difícil mirar a largo plazo con optimismo tal como se puede leer en varios informes de los principales datos del país. No obstante, datos como este son positivos para el conjunto de la economía y un rayo de esperanza para todas esas personas en desempleo.