El sindicato alemán ver.di acusó hoy a la la aerolínea irlandesa Ryanair de boicotear la huelga del personal de tierra en los aeropuertos berlineses de Tegel y Schönefeld al emplear personal propio para despachar doce de sus vuelos.
"La aerolínea ha traído personal propio del extranjero que se encuentra trabajando sin haber pasado los controles de seguridad pertinentes y con autorizaciones expedidas por un día", criticó el responsable de ver.di Enrico Rünmker en un comunicado.
La huelga convocada hoy por el sindicato, sumado al paro de ayer y a otro realizado el viernes, ha obligado a cancelar alrededor de 1.900 vuelos y decenas de miles de pasajeros han resultado afectados.
Ver.di acusó tanto Ryanair como a la empresa gestora del aeropuerto de poner en peligro la seguridad de los pasajeros y denunció ante la Oficina Federal de Transporte Aéreo la presencia en la rampa aeroportuaria de Schönefeld de personal ajeno al aeródromo.
En declaraciones a la televisión alemana rbb, el portavoz de Ryanair Kenny Jacobs confirmó que la aerolínea está empleando colaboradores propios de personal de tierra "perfectamente formados y autorizados" para despachar vuelos en el aeropuerto de Schönefeld y rechazó que no hayan pasado los necesarios controles.
Daniel Tolksdorf, portavoz de la empresa gestora aeroportuaria de Berlín, confirmó la expedición de permisos de acceso a la zona de seguridad aérea de Schönefeld para ocho empleados de la aerolínea y garantizó que "en el marco de su actividad para Ryanair han pasado por un control de seguridad".
Ryanair consideró "una vergüenza" que los planes de los pasajeros berlineses y los visitantes de la ciudad se vean afectados un número reducido de empleados "que mantiene a la capital alemana como rehén".
Según diversos medios, también la aerolínea británica de bajo coste Easyjet y la compañía turca Turkish Airlines emplearon personal propio para despachar parte de sus vuelos.
El sindicato anunció hoy que este tercer día de huelga finalizará el miércoles hacia 4.00 GMT , tras lo que está previsto que las operaciones en Tegel y Schönefeld se vayan normalizando, y garantizó que no habrá más paros hasta el próximo domingo.
La dirección defiende un proceso de mediación y por el momento no tiene prevista presentar ninguna nueva oferta en las negociaciones para fijar las nuevas tarifas salariales.