Los mercados financieros se cuentan entre los más innovadores en cuanto a la cantidad de productos nuevos creados, así como en las formas de operación, por lo que se trata de un campo en constante movimiento y desarrollo. En este sentido, los CFD o contratos por diferencia (Contract for Difference) se presentan como una forma de contener grandes ganancias con un pequeño desembolso, debido al empleo del apalancamiento. Los CFD´s surgen en los años 50 en Londres como una nueva forma de invertir y operar con activos sin que sea necesario tener la propiedad de estos, si bien es en los últimos años cuando han adquirido un mayor papel en los mercados financieros internacionales y en el trading.

El trading con CFD es un negocio bastante flexible y sin barreras de salida ni entrada, ya que no necesita contar con una formación extensa y específica, no se necesitan cantidades voluptuosas de dinero, y se puede obtener una rentabilidad bastante generosa, eso sí, a cambio de un mayor riesgo y volatilidad, dada la característica de apalancamiento usada en este tipo de productos.

La principal atracción de los CFD para los inversores es la buena rentabilidad que se puede obtener, ya que a través de una plataforma de trading, en casa o cualquier lugar, es posible acceder a mercados de todo el mundo, de ahí el auge en la aparición de multitud de plataformas de trading, especialmente de CFD´s. Veamos pues algunas de las principales ventajas e inconvenientes de los contratos por diferencia

Ventajas de invertir en CFD

  • Alto apalancamiento. Como decíamos anteriormente, una de las principales características en la operativa de los CFD´s es que poseen un alto apalancamiento, lo que indica que podemos invertir una cantidad mucho mayor que nuestro capital empleado.
  • No existen tantas comisiones. La ausencia de intermediarios y la forma directa de operar con CFD hace que existan menos comisiones y gastos de transacción que con otros productos.
  • Libertad de elección de activos subyacentes. Como se indicaba, los contratos por diferencia están anclados a la cotización de un activo determinado, denominado subyacente, por lo que se pueden generar de una gran cantidad de subyacentes.
  • Invertir en posiciones cortas y largas. Se puede invertir tanto en tendencias alcistas como bajistas.
  • Mayor rentabilidad. No se realiza la adquisición del bien y propiedad del mismo, por lo que se ahorra en aportar el capital del precio de cualquier activo, y, debido al apalancamiento, se incrementa la rentabilidad.
  • No hay mínimos. No existen aportaciones mínimas de dinero ni condiciones de compra alguna.
  • Estrategias alternativas. Cabe la posibilidad de seguir distintas alternativas de inversión, ya sea la obtención de ganancias, como elemento de cobertura en compraventas o como especulación.
  • Los CFD´s tienen duración infinita. No tienen fecha de vencimiento, por lo que no es necesario modificar los contratos en las operaciones de negociación, mientras que en la compraventa de bienes sí que existen fechas de conclusión.

Riesgos de invertir en CFD

  • Elevado riesgo. Al igual que se pueden obtener grandes ganancias debido al efecto apalancamiento, también es posible obtener altas pérdidas en relación al capital aportado. Por eso es importante empezar probando con cantidades menores.
  • Perfil con experiencia. Los CFD’s se consideran un producto complejo, y por ello es necesario contar con altos conocimientos en las operaciones así como experiencia en mercados financieros
  • Supervisión constante. Debe establecerse un seguimiento continuo, ya que puede estar en un mercado con alta volatilidad.
  • Garantías de apertura de posiciones. Siempre se requieren unas garantías mínimas en la apertura de cuentas, ya que el sistema debe dar confianza al restante de operantes. Si el inversor opera por encima de las garantías, la cuenta se bloquea.
  • Negociación en mercados no regulados. Los CFD’s se negocian en mercados no regulados, y es justamente el creador de un mercado el que presenta y crea el precio.

Sin duda los CFD son los una de las mejores oportunidades de inversión para pequeños inversores y medios, principalmente por la posibilidad de obtener grandes ganancias y la facilidad de operación una vez que se conoce el sistema, sin embargo se trata de productos complejos a los que no toda la clase de inversores puede acceder de inicios, sino que se necesita una comprensión muy profunda de su funcionamiento.