El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, ha dicho hoy que el "brexit" puede representar "un cierto nivel de éxito" para España como mercado financiero internacional, en lo que se refiere al traslado de entidades desde la City londinense.

Albella, que ha clausurado el XXIV Encuentro del Sector Financiero organizado por Deloitte, ABC y la Sociedad de Tasación, ha admitido no obstante que Londres, que es la principal capital financiera del mundo junto con Hong Kong y Nueva York, no va a perder esa preponderancia.

Pero sí es cierto que Europa se va a ver beneficiada, al igual que Nueva York, plaza donde "las noticias sobre el ''brexit'' no son en absoluto malas".

Lo que habrá que ver es, en el caso de España, si efectivamente habrá traslados significativos de personas, entidades que cambien de sede y muevan a cientos de personas, con todo lo que ello implica.

La CNMV está "muy activa", ha recordado, no solo en lo que respecta a su intención de que toda la información esté disponible en inglés, sino especialmente para que no se perciba a España "como un país complicado o raro desde el punto de vista de la supervisión".

La competencia de París o Fráncfort "es muy dura", y los indicadores que envía España, "nos guste o no, no son los mismos que los que emite Alemania o la propia Francia, país que cuenta con una nota de triple A", la máxima que conceden las agencias de calificación.

Lo que si ha descartado es que los casos de corrupción tengan algún efecto en la consideración que se tiene de España como mercado financiero, es algo "que no afecta en nada, un elemento ajeno que no se menciona" en las reuniones con inversores o agentes del mercado, del mismo modo que tampoco se hace con el proceso soberanista de Cataluña.

El supervisor bursátil ya tenía previsto reforzar su plantilla, un empeño en el que Albella coincide con sus predecesores y para el que cuenta con el respaldo del Gobierno.

En los últimos presupuestos prevé ampliarla en unas 50 personas, algunas de las cuales sí que se ocuparán de nuevos desafíos como por ejemplo en el ámbito de la solvencia interna de las entidad, que debe hacer frente a nuevos requerimientos de capital.

En cualquier caso, está claro que va a haber más actividad que de no haberse producido el "brexit", y entidades que ahora cuentan con 30 personas posiblemente tendrán que elevar esa cantidad a 45, y "ese empeño hay que librarlo, "ya que los empeños justos y positivos hay que librarlos", ha dicho.

Lo previsible es que muchas entidades decidan "relocalizarse" en otros países, y aunque algunas van a esperar al desenlace de la negociación, lo cierto es que la incertidumbre "ha llevado ya a algunas de ellas, radicadas en Londres, a moverse", por el temor al "cliff" o precipicio que se vislumbra.

Albella ha querido destacar durante su intervención las consultas realizadas al organismo sobre las nuevas empresas del sector tecnofinanciero, lo que se conoce como "fintech"; el organismo ha recibido unas 40, sobre todo acerca de las plataformas de micromecenazgo, que en su mayoría proceden de España pero también de Reino Unido, Suiza y Alemania.