China ha restringido las inversiones que sus compañías pueden hacer en el extranjero en varios sectores, entre ellos el inmobiliario, hotelero y de fondos de inversión, mientras que ha flexibilizado las normas de otros como la electricidad y las telecomunicaciones.

La Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo ha publicado una actualización de la lista de "sectores sensibles", en los que se limitan las inversiones en otros países, que entrará en vigor a partir del próximo 1 de marzo, según publica hoy el oficial Diario del Pueblo.

Con la nueva regulación, las empresas chinas que quieran invertir en el extranjero en proyectos de telecomunicaciones, promoción de suelo y redes eléctricas sólo necesitarán cumplimentar un formulario y presentarlo ante las autoridades, como en otros sectores comunes, y ya no será necesario contar con una aprobación oficial especial.

Estos sectores dejan de ser considerados "sensibles" por primera vez desde 2014 en que fueron incluidos en la lista.

Por el contrario, la Comisión ha añadido otros como el sector armamentístico, la inversión inmobiliaria, los fondos de inversión en renta variable, hoteles, cine, entretenimiento y clubes deportivos, y ha mantenido otros que ya figuraban como los recursos acuáticos y los medios de comunicación.

Esta decisión se enmarca en la voluntad del Gobierno de "reducir la inversión irracional" de empresas chinas en el extranjero", lo que provocó en 2017 que la inversión china no financiera en otros países cayera un 29,4 % respecto al año anterior, hasta los 120.080 millones de dólares (97.780 millones de euros).