La presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, convocó hoy una reunión gubernamental especial para afrontar los efectos en la seguridad nacional del conflicto comercial entre Estados Unidos y China, dijo hoy el portavoz presidencial Wong Chung, en un comunicado.

Al evento asistieron el primer ministro Lai Ching-te, el secretario general del Consejo de Seguridad Nacional, David Lee y otros ministros y se pidió a varios organismos que realicen análisis para tomar las medidas oportunas.

Hasta el momento la disputa comercial tendrá un "impacto económico limitado" sobre Taiwán y sus empresarios en China, valoró Wong.

Sin embargo, en caso de que se expanda el conflicto, se "desencadenará un mayor proteccionismo y alta volatilidad en los mercados financieros y el comercio", añadió.

Además, es importante prestar atención a "los cambios estructurales que puede ocasionar", como por ejemplo sobre la participación taiwanesa "en la cadena de suministro de la región y en "las relaciones trilaterales entre China, Estados Unidos y Taiwán", agregó el portavoz.

Mientras tanto, el Ministerio de Economía isleño señaló que las empresas taiwanesas que fabrican en China y exportan a Estados Unidos serán las más afectadas por esta disputa comercial, y en concreto las de los sectores de maquinaria, equipos electrónicos, piezas de automóviles e instrumentos ópticos.

Taiwán es uno de los más importantes inversores en China y sus empresarios han establecido en ese país decenas de miles de empresas orientadas a la exportación.

En 2017, La inversión acumulada en China por parte de las empresas taiwanesas con cotización en la bolsa isleña alcanzó los 78.000 millones de dólares según el Ministerio de Finanzas taiwanés, aunque otros analistas afirman que superan los 100.000 millones de dólares.