El director financiero de BBVA, Jaime Sáenz de Tejada, ha admitido que la incertidumbre política hace que los inversores sean más prudentes y ello afecta al precio de la acción, pero considera que el banco recuperará tracción debido a que sus resultados financieros están siendo "muy buenos".

En una entrevista publicada en la web corporativa de la entidad, Sáenz de Tejada ha asegurado que el reconocimiento de las fortalezas financieras de BBVA es "unánime". "En los resultados de los tres primeros meses de este año, destacaría el comportamiento de los mercados desarrollados", ha indicado.

El responsable financiero de la entidad presidida por Francisco González ha explicado que las menores pérdidas asociadas a la cartera inmobiliaria están permitiendo aflorar el potencial de generación de resultados en España, mientras que en Estados Unidos las subidas de los tipos de interés y las ganancias de productividad les están permitiendo crecer de forma "exponencial".

El directivo cree que el mercado reconoce la visión del banco "extraordinariamente nítida y aterrizada en el futuro", así como su "capacidad de ejecución de la estrategia" como ventajas frente a sus competidores.

De cara al ejercicio actual, espera que la entidad continúe generando "un buen" crecimiento en la parte de arriba de la cuenta de resultados y mejorando la productividad y la eficiencia. "El control del gasto seguirá siendo una seña de identidad del banco y nos espera un buen año en coste del riesgo", ha añadido.

MAYOR CONCENTRACIÓN BANCARIA LOCAL

Después de diez años desde el estallido de la crisis financiera mundial, Sáenz de Tejada considera que la sociedad española ha demostrado una "extraordinaria madurez" a la hora de enfrentarse a las consecuencias, tomando decisiones muy complicadas, al igual que el sector financiero en su conjunto.

"Este esfuerzo ha permitido elevar los niveles de solvencia y disminuir el apalancamiento de manera muy significativa. El sistema financiero ha mejorado de manera relevante el gobierno corporativo y la capacidad de planificación para anticipar escenarios adversos", ha señalado.

De igual forma, ha precisado que la banca está "mucho mejor" preparada para enfrentar la próxima crisis y que sus consecuencias no sean soportadas por el ciudadano.

Sin embargo, Sáenz de Tejada ha admitido que aún queda alguna asignatura pendiente, como la rentabilidad. "Todavía muchas entidades españolas y del resto de Europa no son capaces de cubrir su coste de capital", ha dicho.

En este sentido, el directivo considera que las entidades de menor tamaño van a tener "muy difícil" generar la rentabilidad que les exige el mercado en un contexto de nuevos modelos de negocio y de aceleración de los procesos de digitalización.

"Es probable que surja oportunidades de concentración en los mercados locales", ha afirmado Sáenz de Tejada ante la pregunta de si habrán más compras transfronterizas entre bancos. De este modo, respecto a las operaciones internacionales, el directo financiero de BBVA cree que son "más complicadas", sobre todo sin un mayor avance de la unión bancaria.

"Las sinergias de costes son claves en las operaciones de consolidación y, de momento, son complicadas de obtener en operaciones transfronterizas", ha concluido.

GRAN DEPENDENCIA DEL RATING SOBERANO

Respecto a las subidas de la calificación crediticia por parte de la agencias de rating, BBVA cree que responde a su capacidad de "navegar en aguas realmente tormentosas" durante los últimos años, así como a un reconocimiento del modelo de negocio, de gobierno y de apetito al riesgo.

"No debemos olvidar que BBVA fue durante muchos años uno de los pocos bancos privados del mundo con rating ''AA'' para las principales agencias. Hasta que llegó el ''annus horribilis'' de 2012, cuando en apenas 12 meses, casi llegamos a perder el grado de inversión por parte de casi todas las agencias como consecuencia de la evolución de la nota de España", ha señalado.

No obstante, Sáenz de Tejada cree que desde entonces el banco ha ido demostrando su "sostenibilidad y robustez". Asimismo, destaca su diversificación internacional, que le ha permitido no perder dinero en ningún año durante la crisis económica. "Esto es algo que pueden decir muy pocas entidades en Europa", asevera.

Con todo, ha reconocido que el peso del ''rating'' soberano sobre el de BBVA es "demasiado elevado". El director financiero de BBVA ha apuntado que esta dependencia irá reduciéndose a medida que la unión bancaria avance, el marco de resolución se termine de construir y se pueda crear un fondo de garantía de depósitos común en Europa.

"Será entonces cuando la potencia y las fortalezas intrínsecas de BBVA sean las únicas que condicionen el ''rating''. El banco, claramente, saldrá fortalecido", ha destacado.