Las protestas en Francia por el alza del precio de los carburantes han atrapado a entre 3.000 y 4.000 camiones en áreas de servicio y polígonos industriales de Cataluña, por lo que la Generalitat ha pedido a la DGT que empiece a avisar a los conductores en Zaragoza y Valencia para evitar el colapso.

En rueda de prensa, el conseller de Interior, Miquel Buch, ha anunciado que se ha puesto en contacto con la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, para que refuerce su petición a la DGT para que empiece a alertar a los camioneros de esta situación en Zaragoza y Valencia, antes de que lleguen a Cataluña, donde las áreas de servicio "están muy llenas".

"La situación en Cataluña empieza a ser complicada", ha advertido Buch, que ha detallado que algunos camiones que no pueden atravesar la frontera con Francia, con colas que llegan hasta los 14 kilómetros, permanecen en polígonos industriales porque las áreas de servicio están ya muy llenas.

Ante esta situación, Buch ha convocado para esta tarde una reunión con responsables de los Mossos d''Esquadra, el Servicio Catalán de Tráfico, Protección Civil y los transportistas para analizar la situación e intentar acordar una estrategia conjunta.