La presidenta del Santander, Ana Botín, ha pedido en el Foro de Davos la unión bancaria europea "desesperadamente" con el fin de que Europa sea más competitiva en el mundo, destacando que es "el único camino" para que la economía el continente continúe creciendo.

Según Botín, esta unión permitiría compartir riesgos, de forma que acabarían reduciéndose, siguiendo el ejemplo de lo que ocurre en Estados Unidos, donde además la financiación dependiente del sistema bancario solo supone el 50%, frente al 90% que alcanza en Europa.

Junto con esta nueva institución, Botín también asegura que es necesario un mercado único de Servicios, ya que los dos mayores bancos de la eurozona tienen menos del 2% de cuota de mercado, frente a la situación que se da en Estados Unidos.

Por ello, la ejecutiva cree que aunque Europa lo haya hecho "increíblemente bien" en los últimos 40 años, debido a la "economía de mercado y a la libertad", necesita crear instituciones para que pueda decidir "su peso en el mundo".

Respecto a los asuntos regulatorios, la presidenta del Santander ha pedido "políticos y gobiernos que entiendan cómo funciona la economía", en relación al pago de impuestos, que considera que se tienen que pagar "allí donde se produce el beneficio".

En este sentido, ha pedido que los impuestos "sean justos" y que a las compañías que prestan los mismos servicios se le apliquen las mismas reglas, algo que según ella "no ocurre".

Por último, ha urgido a que, frente a la "fama" que tiene Europa de hacer las cosas "despacio", se empiecen a hacer "un poco más rápido", apuntando a la educación y a la formación en nuevas habilidades como "cruciales" para el futuro de Europa.