En la actualidad existen infinidad de contextos donde el cliente necesita de liquidez inmediata y para ello ha de confiar en los servicios de las entidades vía internet que ofrecen créditos online, pues en la mayoría de los casos, los procesos burocráticos de un banco hacen que este préstamo se demore o que incluso sea cancelado debido a la falta de algún requisito.

Estas entidades online normalmente aprueban la solicitud en un plazo no superior a 30 minutos, permitiendo así hacer frente a cualquier inconveniente económico que surja.

Varias formas de tener el dinero el mismo día de la solicitud

No obstante, existen algunos procedimientos que hacen que aquellos clientes que desean disfrutar del dinero justo cuando lo solicitan (el pago de una factura que vence en breve, una oferta que caduca ese mismo día...) puedan lograrlo.

Acudir a entidades financieras online que trabajen con el mismo banco que el solicitante

Puede ocurrir que la solicitud sea aprobada en cuestión de minutos, pero debido a los trámites burocráticos que conlleva la transferencia de una cantidad de una cuenta bancaria a otra de distinta entidad, lo más normal es que el dinero no esté disponible hasta 24-48 horas a partir de la aprobación del préstamo, plazo de entrega que, por supuesto, sigue siendo eficaz.

Para corregir este desajuste, antes de pedir préstamos rapidos online, una buena idea es asegurarse que esta entidad financiera trabaje con el mismo banco que el demandante. De esta forma el dinero seguro que se podrá disfrutar a los pocos minutos de que se haya hecho la solicitud.

Confiar en entidades financieras con procedimientos más ágiles

Lo más normal es que todas estas sucursales tengan unos procedimientos ideados para hacer que el cliente no pierda el tiempo y que a través de pocos pasos pueda solicitar el dinero necesario. No obstante, es cierto que algunas empresas piden más requerimientos que otras, haciendo que este proceso, aun siendo ágil, no sea el más rápido. Por ejemplo hay entidades que no piden justificantes de ingresos, detalle que para el cliente supone una comodidad por no tener que buscar esos documentos.

Además, el avance tecnológico también ha facilitado que algunos de estos entidades puedan ofrecer los préstamos de una forma mucho más automatizada e intuitiva para el cliente.

Manteniendo una buena trayectoria

Un cliente que ya haya realizado una solicitud y haya cumplido religiosamente con los plazos de devolución tiene muchas más probabilidades de que su nuevo préstamo sea aprobado en cuestión de minutos. Si por alguna casualidad se encuentra en la lista de ASNEF o en su día tuvo problemas para devolver alguna de las cuotas, en principio puede disfrutar del préstamo, pero el proceso tendrá que ser estudiado con más detenimiento y el proceso no será tan rápido.

Cantidad solicitada

Obviamente no es lo mismo solicitar 100 euros que solicitar 5000 euros. Cómo ocurre con el caso anterior, cuanta mayor sea la cuantía, mayor será el proceso de estudio. De hecho, para grandes cantidades sí que se exigirá algún documento (un aval, una nómina, una hipoteca...) que garantice que el dinero podrá ser devuelto.

La importancia de los préstamos personales

Es en este último punto donde radica la importancia y el porqué de las entidades financieras online que facilitan mini créditos o créditos personales de cuantías relativamente pequeñas. Un minicrédito no pone más en riesgo que la propia reputación personal, pues al ser cantidades tan pequeñas, en caso de no devolución (cosa por otra parte difícil gracias a las facilidades de devolución que ofrecen las entidades online) las tasas de interés no implican elementos de gran valor como la hipoteca de la vivienda.

Además, este tipo de créditos son ideales dentro de un contexto económico como el que se está viviendo. Nadie está exento de que se le averíe la lavadora, de que le pongan una multa de tráfico o de que se le junten en el mismo mes la factura de la luz, la del agua y el seguro del coche, situaciones que imperan dinero inmediato pero con una cantidad que puede ser fácilmente salvable.