¿Qué es un indeciso? El analista electoral Pedro Lasso explica que se trata de los electores que manifiestan no saber a quién votar en los comicios. Lo opuesto es el votante "ideológico", que está seguro antes del proceso que ejercerá el derecho a votar así como el sentido de su voto. "Vota al partido con independencia, incluso, de quién sea el candidato", añade.

Por su parte, el profesor titular de Ciencia Política de la Universidad de La Laguna (ULL), José Adrián García Rojas, explica que los indecisos "no son tales en realidad", sino que teniendo ya una preferencia optan por no revelarlas cuando se les pregunta al elaborar las encuestas.

¿Decide el resultado de las elecciones el grupo de ciudadanos que deshoja la margarita de las opciones políticas hasta última hora? Los analistas están de acuerdo en que no tienen ese poder. Al menos, no en los comicios locales y autonómicos que se celebrarán mañana. El peligro para los partidos -y la democracia- son los abstencionistas, si bien el perfil de ambos suele coincidir en un mismo elector.

Los indecisos, de hecho, "también son candidatos a la abstención" tal y como demuestran algunos estudios realizados en sociedades donde la ideología pesa menos, como la de EEUU, indica García Rojas. "Deciden el voto en función de los resultados que prevé que saldrán y respaldan a la opción con más probabilidades. Lo que los moviliza es el carro ganador", explica.

Pero esta campaña "poco definida y poco movilizadora", continúa, "no ha ayudado nada a que el indeciso defina su preferencia" y ha sido así porque los partidos "en el fondo" no prevén que los resultados dependan de ese grupo.

Lasso está de acuerdo. "No deciden los resultados", afirma. "Es difícil cuantificarlos, pero lo seguro es que tienen poca presencia en el electorado". En cambio, apunta García Rojas, lo que importa a los partidos es que sus fieles vayan a votar, en vez de tratar de convencer a este colectivo. Según García Rojas, una alta abstención perjudicaría más a los partidos de izquierda que a los de derecha.

En esto ya no está de acuerdo Lasso, que piensa que una baja participación favorece, por regla general, al partido que gobierna -con independencia de su ideología- porque "tiende a dejar las cosas como están", mientras que una alta participación favorece un cambio de color político en las instituciones.

"El indeciso, en principio, es un abstencionista en potencia", advierte Pedro Lasso. "Inexorablemente, salvo que se decida a última hora, es un abstencionista", insiste.

De hecho, en estas elecciones, Lasso alerta que el mayor peligro para los partidos no es que se produzca un giro importante en el sentido del voto que cambie de forma radical el color político de las instituciones, sino el efecto que pueda derivarse de la abstención.

En todo caso, recuerda con amargura Lasso, la abstención en Canarias es "históricamente alta" y no duda de calificarla de "mal" al admitir que el Archipiélago es de las regiones más abstencionistas de todo el país, lo que califica de "irresponsabilidad ciudadana tremenda".

Lasso lamenta que ni un solo partido político ni una institución se haya tomado la molestia de encargar estudios sociológicos que indaguen por qué hay tanto abstencionistas en Canarias. "Solo existen impresiones, no respuestas contratadas sobre las causas que expliquen la alta abstención en las Islas", insiste. "No se puede intentar rescatar a abstencionistas sin conocer las causas", señala.

Colchones de votos

Los partidos, en todo caso -y en esto coincide Lasso con García Rojas- prestan mucha más atención a los ciudadanos que ya manifiestan preferencia por su opción electoral: los llamados "colchones", que son el segmento de votantes ideológicos cuyo apoyo está garantizado más allá de quien sea el candidato de la formación.

Lo que explica el trasvase de votos entre un partido y otro hace cambiar el color político de una institución obedece a una mayor participación del electorado. "Los cambios se producen provocados, esencialmente, por una mayor participación que desequilibra el estatus lineal del poder", explica. "Y esto es verdad para todos los partidos". Por eso, solo a los partidos con un "alto grado de fidelidad" les beneficia la abstención.

partidos

El coordinador de campaña de Coalición Canaria (CC), José Luis Perestelo, relaciona el modo de ser "prudente" y "reservado" de los canarios con el porcentaje de indecisos. Perestelo asegura que la gente "lo tiene muy claro", por tanto sabe quién ha gobernado estos cuatro años y qué se ha hecho bien. Al respecto, espera que la gente separe el "ruido" y la "confrontación" de la campaña del trabajo de quien ha estado gobernando, y que vote.

Julio Cruz, responsable de campaña del PSC, destaca la importancia de los indecisos, pese a que su porcentaje no es muy alto. Considera Cruz que estos potenciales votantes pueden "inclinar la balanza" hacia un lado o hacia otro de una manera más acentuada, razón por la cual los esfuerzos de su partido se han centrado en hacerles ver la importancia de que voten "para que otros no decidan por ellos".

La vicesecretaria de Organización e Innovación y responsable de campaña del PP, Mari Carmen Hernández Bento, está convencida de que, esta vez, hay "menos indecisos que en otras ocasiones", si bien teme que la abstención "puede ser alta". Bento admite que mucha gente está "asqueada" de la clase política, "pero indecisos hay menos y los votantes están motivados".