Los 350 diputados elegidos el domingo verán cómo la crisis ha pasado la tijera por sueldos y complementos, y aunque van a poder disfrutar de la tecnología más avanzada gracias al iPad que recibirán tras incorporarse a sus cargos también tendrán más trabajo, porque las sesiones parlamentarias serán más largas.

Habrá más grupos parlamentarios en el hemiciclo y por tanto serán más los portavoces y los turnos de palabra en los debates prolongarán la duración de los plenos de la Cámara Baja.

Su salario será el que les quedó en 2010 tras rebajarse las retribuciones de los parlamentarios, ya que en 2011 el importe de estas "nóminas" ha permanecido congelado.

El "tijeretazo" fue de un 10 por ciento en su sueldo base, llamado "asignación constitucional", pero en el caso del presidente la reducción subió a un 15 por ciento y al 12 por ciento para los miembros de la Mesa.

De esta manera, el salario base de los nuevos diputados será de 2.813 euros mensuales, a los que se suman otros 1.823 para los elegidos en circunscripciones de fuera de Madrid y 870 euros para los residentes en esta comunidad, es decir, las mismas retribuciones que han tenido sus antecesores en los dos últimos años.

Sí notarán diferencia en el régimen de pensiones, aunque no inmediatamente, sino para cuando dejen los escaños, ya que en junio se eliminaron aquellos complementos e indemnizaciones que se consideraron privilegios.

Así ocurrió con los complementos que percibían los diputados de las primeras legislaturas que no pudieron cotizar a la Seguridad Social por haber tenido que exiliarse.

Los exdiputados y exsenadores tampoco cobrarán la indemnización mensual por cese de su función si tienen un trabajo, perciben algún tipo de honorario o cobran una pensión.

Y han desaparecido las prestaciones por fallecimiento para cónyuges o hijos menores de 25 años y otras ayudas extraordinarias que sólo se concederán si así lo acuerda una mayoría de tres quintos de los miembros de las Mesas.

Es previsible que los diputados de la X Legislatura viajen menos que sus predecesores si se sigue aplicando el acuerdo de la primavera de 2010 mediante el cual se suspendieron todos los viajes internacionales de los diputados, salvo los obligados por acuerdos o tratados.

Seguirán contando con despacho propio, línea ADSL en sus domicilios y teléfono móvil a cargo de la Cámara -un iPhone- pero en vez de un ordenador portátil recibirán una tableta iPad suministrada por la compañía telefónica que presta los servicios de comunicación al Congreso.

Y para acudir a las sesiones plenarias, los elegidos por circunscripciones de fuera de Madrid seguirán viajando con cargo a las Cortes en la clase preferente de Renfe o Iberia, si bien la tarifa que pagan es de clase turista.