Ricardo Díez Pascual (PP), de 85 años, le da la impresión de que defraudaría a su pueblo si dejara de presentarse a la alcaldía de Castillejo de Mesleón (Segovia) porque se siente respaldado por los vecinos, pese a llevar casi 51 años en el cargo, el que más tiempo lleva de alcalde en España ininterrumpidamente.

"Moralmente tengo que seguir porque el pueblo me apoya", explica en una entrevista con la Agencia quien lleva cinco décadas al frente de la alcaldía de un pequeño municipio de 150 habitantes situado junto a la carretera A-1 (Madrid-Burgos).

La historia política de este veterano alcalde, estos días con un apósito próximo a la ceja izquierda debido a una caída, comienza cuando fallece su tío y alcalde Lucio Lorenzo, con quien desempeñaba el cargo de teniente de alcalde al comienzo del año en que Franco proclamó la era de los "XXV años de paz".

Pero se negó a ocupar el sillón consistorial porque, debido a su oficio como vendedor de pienso, ayudando a su padre, pensó que le podría acarrear enemistades y la perdida de clientes.

Díez, que ha sido diputado provincial durante ocho años en diferentes mandatos, ya en democracia, recuerda cómo entre los amigos buscaron a quien pudiera ser el alcalde, Domingo Villa Sánchez, con la mala fortuna de que éste sufrió una embolia cerebral a los pocos días de tomar posesión.

Al final, el 4 de noviembre de 1964, tras el visto bueno del entonces gobernador civil y jefe provincial del Movimiento, Juan Murillo de Valdivia, tomó posesión en su municipio y ahí sigue, aunque ha pasado por varios partidos: la UCD, el PDP, la Democracia Cristiana, el CDS y, ahora, el PP.

Hace cuatro años, en las últimas elecciones municipales, obtuvo el 67,4% de los votos -con cinco concejales- frente al 26,51 por ciento del PSOE -sin representación- asegura, pese a lo cual comenta que en el pueblo están todos muy unidos y se jacta de no haber tenido problemas con ningún concejal.

"Me han hecho tantos homenajes que no tengo más remedio que seguir", es el mensaje que ha lanzado a sus vecinos en una carta, a la vez que se refiere a los servicios que ha conseguido para el municipio y la creación de empresas, desde gasolineras a un centro hostelero en un antiguo edificio para el esquileo.

Unido políticamente al fallecido Modesto Fraile y a quien fuera su compañero en la UCD y el PDP, Carlos Gila, este político longevo mantiene que nunca ha tenido un problema, ni cuando llegó a la política ni en la actualidad, y recuerda que en sus primeros años el pueblo "era un basurero".

En el franquismo, con obras de acción comunitaria, en las que él se ponía siempre a la cabeza al año de haber llegado a la alcaldía, lograron llevar el agua a las casas, después el saneamiento y el arreglo de calles, "trabajando todos como leones", explica.

Ricardo Díez Pascual