Mugaritz evalúa los perfiles de nutrición

Una de las motivaciones de la alta gastronomía es ofrecer a sus comensales nuevas sensaciones y vivencias descubriendo sabores y texturas inesperadas.

Sin embargo, la inquietud por la nutrición y la importancia de la dieta en la salud hace que Andoni Luis Aduriz, chef del restaurante Mugaritz (ubicado en Rentería y considerado el cuarto mejor del mundo por la revista especializada "Restaurant"), dé nuevos pasos en esa línea.

Conscientes de la calidad de los ingredientes empleados en la restauración de alta cocina, se ha llevado a cabo un estudio con el objetivo de medir el valor nutricional de sus platos y aportar un valor añadido a la experiencia sensorial que implica el paso por Mugaritz.

Estos trabajos se han desarrollado junto a AZTI-Tecnalia, que ha aportado el conocimiento científico necesario para evaluar el perfil nutricional de sus platos y la aportación de los menús del restaurante a la calidad global de la dieta.

Para ello, se ha asentado un criterio científico-técnico basado en las opiniones científicas de la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria).

Los estudios de composición nutricional de los menús se han realizado en base a un análisis completo de su composición teniendo en cuenta tanto macronutrientes (proteínas, azúcares y grasas saturadas, monoinsaturadas y poliinsaturadas), como micronutrientes (sodio, potasio y calcio), además de fibra, colesterol y ácidos grasos omega-3 EPA y DHA, entre otros.

El estudio ha permitido obtener información sobre el aporte calórico y nutritivo de los menús de Mugaritz. Se trata de un estudio pionero que pone de manifiesto la importancia de la alta cocina como referente no sólo en el ámbito gastronómico sino en el campo de la nutrición, cuidándola dentro de una dieta de ocio y ejerciendo de prescriptor para otros sectores de la restauración moderna.

LA MATANZA

Semana culinaria en la tasca La Siembra

Cuando se cumple un año de la inauguración de su andadura, la tasca La Siembra de Luis Gil-Bermejo prepara una semana gastronómica, que tiene previsto su inicio en dicho local norteño a finales de enero. Se aprovechará para presentar nuevos platos dentro de los cambios en cocina y sala.

POR SI HAY ESCAPADA

Yakitori, viaje por los gustos asiáticos

La cocina asiática sigue conquistando Madrid. Japoneses, tailandeses y vietnamitas se han convertido en restaurantes con muchos adeptos en la capital y el dilema surge a la hora de elegir una de estas cocinas milenarias.

La empresaria china Elisa Ming, al igual que en sus restaurantes Matsuri y Matsuri T&W, ha encontrado la solución ideal en su nuevo local Yakitori, en Pozuelo de Alarcón, que presenta tradicionales wok y teppanyaki, donde el cliente puede escoger entre una amplia variedad de ingredientes para hacer los platos cada uno a su gusto.

Además, cuenta con sushi y una cuidada selección de yakitori, especialidad culinaria que da nombre al local. Y es que variedad, cantidad y, ante todo, la calidad de sus productos son las señas de identidad de este establecimiento.

La oferta de Yakitori es mucho más amplia y el cliente también puede decantarse por una sopa cangrejo, elaborarse una ensalada con más de 10 ingredientes, saborear un típico arroz tres delicias o unos noodles.

Otro de sus platos estrella es el delicioso pato laqueado, preparado en un horno especial para asar estas aves al estilo tradicional pequinés.

(Avenida de Europa, 27. 91 742 79 89. Pozuelo de Alarcón. Madrid. www.yakitori.es).

SALUDABLE

Calma con las dietas tras la Navidad

Los expertos en nutrición aconsejan que para perder el peso ganado por los excesos alimenticios de las vacaciones navideñas es necesario llevar a cabo una dieta basada en la combinación de alimentos y en ritmos de comidas racionales, con al menos cuatro comidas y sin picar entre horas. Esta dieta racional consiste en recuperar un horario de comidas equilibrado que respete cuatro turnos en los que se coma hasta quedar saciado, puesto que no se debe consumir nada calórico entre comidas y es mejor comer hasta saciarse que comer continuamente sin saciarse. Todo este plan de comidas debe ir acompañado de un programa de ejercicio aeróbico y continuo, que debe ser de carácter leve o moderado pero siempre periódico.