La Fundación para la Cultura del Vino, que integran seis bodegas y el Ministerio de Agricultura, promocionará el consumo moderado de los vinos de calidad en los próximos dos años.

"La calidad tiene un precio y se tiene que pagar", explica el nuevo presidente de la Fundación, Eduardo Muga, quien se muestra convencido de que hay clientela objetiva que así lo reconoce.

Muga, director financiero de Bodegas Muga, de Rioja, admite que la crisis económica ha afectado al vino, pero asegura que aquellas bodegas que durante la etapa de crecimiento económico han reinvertido en redes de comercialización, herramientas de comunicación, viticultura y en internacionalización, "están aguantando mucho mejor esta coyuntura".

Bajo el denominador común de la promoción del consumo moderado de los vinos de calidad, la Fundación se centrará en esta nueva etapa en la consolidación de los Encuentros Técnicos Tecnológicos, la revista Terruños y el Sabor de los Grandes.

Estos eventos son, según Eduardo Muga, algunos ejemplos que en España se dan en relación estrecha entre el mundo de la cultura y el del vino, y que la Fundación difundirá a través de su webwww.culturadelvino.org.

También se propone el desarrollo de nuevos proyectos que impulsen la cultura del vino, en colaboración con instituciones del mundo del arte y de otros sectores de referencia.

La Fundación para la Cultura del Vino se creó en 1992 y está integrada por el Ministerio de Agricultura, Bodegas Julián Chivite (DO Navarra), Bodegas La Rioja Alta (DOC Rioja), Bodegas Terras Gauda (DO Rías Baixas), Bodegas Muga (DOC Rioja), Bodegas Vega Sicilia (DO Ribera de Duero) y Vinos de los Herederos de Marqués de Riscal (DOC Rioja), que ocupa la vicepresidencia.