La actriz y presentadora Ana Obregón se sincera con "Así soy yo", un libro que reúne sus memorias y en el que trata de mostrar "la Ana de verdad" y que está escrito desde la "necesidad" y el "derecho". "Se ha dado una imagen de mí que no se corresponde con la realidad", sentenció.

Estas declaraciones las hizo ayer poco después de la presentación del libro, que congregó a medio centenar de medios y que se emitió en directo en dos televisiones nacionales, como muestra del revuelo mediático que suele rodear a la presentadora. En la entrevista, la actriz reconoció los claroscuros de la fama: "Si eres un personaje público, van a hablar de tu vida privada, lo malo es que habla gente que no te conoce de nada. La verdad de mi vida la sé yo y no la sabe nadie más".

Por eso, de las casi cuatrocientas páginas que engrosa "Así soy yo" (Planeta), casi dos terceras partes las dedica a su infancia y sus inicios profesionales con estudios de interpretación en la Academia Lee Strasberg en Nueva York, sus primeros trabajos como modelo o la incursión en el mundo empresarial como consejera de la inmobiliaria de su padre. El tercio restante del libro lo dedica a sus relaciones personales, las que la han aupado como uno de los personajes más célebres de la prensa del corazón y que todo el mundo conoce. Es el caso del idilio con el jugador de baloncesto Fernando Martín, el cantante Miguel Bosé o el noble italiano Alessandro Lequio, un destacado personaje de la vida social española que ayer asistió a la presentación del libro como representante de una televisión y que interrumpió en varias ocasiones el acto para malestar de la recién estrenada autora.

"No soy escritora ni pretendo serlo", advirtió adelantándose a posibles críticas. Obregón, por último, reconoció lo "difícil" del proceso de escritura, en el que ha tenido que tirar de los 28 diarios que ha escrito desde los 12 años, edad en que sufrió una enfermedad de estómago que la obligó a permanecer en cama y en que se sentía un "patito feo".