es 27 de septiembre, el exmasajista de Kevin Spacey interpuso una demanda contra el actor estadounidense por un presunto delito de acoso sexual, cuando acudió a casa del mismo en octubre de 2016. También se enfrenta a un delito de detención ilegal por encerrar contra su voluntad al demandante el mismo día.

El masajista, que está representado por la reconocida abogada Genie Harrison, según informa Variety, fue contratado como terapeuta por alguien del entorno del intérprete. Cuando acudió al domicilio del intérprete en Malibú (Miami) cerró la puerta de la sala de masajes con llave y le pidió que le realizará un masaje en la ingle, por lo que tuvo que tocarle los genitales en dos ocasiones durante la sesión.

Instantes después, Spacey, despedido de la serie House of Cards tras las acusaciones de acoso sexual, cogió la mano del demandante y la dirigió hacia sus testículos, ante lo que el trabajador decidió apartarse pero continuó con la sesión.

No obstante, el actor volvió a agarrarle la mano, "pero esta vez obligó a frotarle el pene y testículos", recoge la demanda. Ante la negativa del masajista a realizar semejante acción, Spacey le intentó besar y además le ofreció sexo oral.

Asimismo, la demanda detalla que debido a aquel acoso sexual, "como resultado directo e inmediato de la conducta ilegal de Spacey, como se alegó anteriormente, el demandante sufrió y continúa sufriendo daños económicos, perdidas de ganancias y otro tipos de daños", aunque de estos últimos no se detalla más.