El Gobierno de Somalia, que encabeza el presidente Sharif Sheikh Ahmed, declaró ayer la guerra a los grupos radicales islámicos que tratan de derrocarlo y reanudó los combates en Mogadiscio para "restaurar la seguridad" en la capital del país.

El ministro de Defensa del Go-bierno de Sheikh Ahmed, Mohamed Abdi Gandi, compareció ayer en una rueda de prensa en Mogadiscio en la que afirmó que habían "iniciado la guerra para acabar con el largo periodo de inestabilidad que ha sufrido nuestra capital".

"Hemos dado a los opositores tiempo suficiente para aceptar la paz y no lo han hecho, así que hemos comenzado la guerra y no pararemos hasta expulsarlos de Mogadiscio", recalcó Gandi.

Al menos 30 personas murieron y un centenar resultaron heridas en los enfrentamientos ocurridos ayer entre las fuerzas del Gobierno y las milicias radicales, según diversas fuentes.

Entre los fallecidos está el periodista Abdirasak Mohamed Warsame, conocido como "Gadao", que murió a consecuencia de un enfrentamiento que le sorprendió cuando se dirigía a su trabajo en Radio Shabelle, según confirmó a Efe el director de la emisora, Mukhtar Mohamed Hirabe.

Del resto de fallecidos, veinte son civiles, de los que siete murieron en un autobús sobre el que cayó un mortero, y además murieron en esta jornada cinco rebeldes y dos soldados del Gobierno, según dijeron responsables de servicios asistenciales.

Más de un centenar de personas fueron trasladadas ayer con heridas de diversa consideración a los hospitales de Madina y Keysaney, confirmó el subdirector del primero de estos centros, Dahir Mohamud.