Roh Moo-hyun, presidente de Corea del Sur entre 2003 y febrero de 2008, se suicidó ayer en plena investigación de un escándalo por supuestos sobornos millonarios durante su mandato, según informaron los medios surcoreanos.

El ex mandatario se precipitó al vacío desde lo alto de una montaña rocosa cercana a su casa y dejó en su ordenador una nota para su familia en la que le pedía que no lloraran, daba instrucciones para su cremación y confesaba que los últimos tiempos han sido "muy duros", precisó la agencia surcoreana Yonhap.

Su antiguo secretario y abogado, Moon Jae-in, argumentó que el ex mandatario, un abogado progresista de 62 años, "al parecer se tiró" por decisión propia, lo que hizo aprovechando un descuido del guardaespaldas que lo acompañaba en su paseo por la montaña.

El óbito fue certificado casi tres horas después, a las 9:30 hora local (00:30 GMT), en el hospital de Busan (sur del país), donde fue ingresado con fracturas múltiples y una incisión de once centímetros en la cabeza.

"El dolor que le he causado a demasiada gente es excesivo y el que está por venir es inconmensurable", señaló en su nota de despedida este abogado defensor de los derechos humanos, que con su mandato buscó, sin lograrlo, la reconciliación con Corea del Norte.

El actual presidente surcoreano, el conservador Lee Myung-bak, se confesó ayer "impresionado" por la muerte de su antecesor, que calificó de "tragedia nacional". Ni él ni su equipo "se creen" lo sucedido, según la Casa Presidencial.

La muerte de Roh ha sobrecogido a los surcoreanos, que sufren una fuerte crisis económica y están acostumbrados a las convulsiones políticas y a las corruptelas de sus líderes, pero que nunca hasta ahora habían vivido el suicidio de un ex presidente.

Los escándalos por pagos o favores entre políticos y ejecutivos de conglomerados como Hyundai o Samsung son comunes en la política surcoreana y con Roh eran tres los ex mandatarios investigados por corrupción, si bien los otros dos se salvaron por un oportuno perdón presidencial.

En otro contexto, Corea del Sur y la Unión Europea (UE) volverán a reunirse en París a finales del próximo mes para intentar concluir las negociaciones de su futuro Tratado de Libre Comercio (TLC), informó ayer el Gobierno surcoreano.