El Consejo de Seguridad de la ONU condenó anoche el ensayo nuclear norcoreano y el lanzamiento de tres misiles de corto alcance como una "clara violación" de sus resoluciones, al tiempo que evaluará de inmediato si como castigo impone nuevas sanciones a Pyongyang. "Los miembros del Consejo de Seguridad subrayaron su firme oposición y condena al ensayo nuclear hecho por Corea del Norte, lo que constituye una clara violación de la resolución 1.718", indicó su presidente de turno y embajador de Rusia, Vitaly Churkin, al término de la reunión. El Consejo se reunió de urgencia y a petición de Japón durante poco más de 40 minutos, y a su término, Churkin subrayó que todos sus miembros sintieron "la necesidad de dar una respuesta inmediata" al desafío lanzado por Pyongyang. Los quince países del Consejo decidieron expresar su preocupación por las acciones de Corea del Norte en forma de comentarios de la presidencia, de menor rango que las declaraciones o resoluciones, que en anteriores ocasiones han tardado hasta más de una semana en consensuar. "Es una declaración de intenciones" sobre lo que va a suceder, señaló Churkin, que también avanzó que los países están de acuerdo en tratar a partir de hoy la posibilidad de autorizar una nueva resolución en contra del país asiático. En esta ocasión, los países no tardaron en ponerse de acuerdo en que la acción ha violado la resolución 1.718, que aprobaron después de la prueba nuclear del 9 de octubre de 2006, insta a Pyongyang a suspender las actividades relacionadas con su programa de misiles balísticos y le impone sanciones económicas.