La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, mostraron hoy su confianza en el Gobierno griego y la instaron a cumplir sus compromisos de austeridad y estabilidad para evitar los "ataques" que sufre la zona euro.
Merkel y Zapatero comparecieron en rueda de prensa tras su reunión en Hannover antes de inaugurar CeBIT, la mayor feria internacional dedicada a las tecnologías de la información que cuenta este año con España como país invitado.
Ambos coincidieron en la necesidad de coordinar las políticas económicas europeas e instaron a todos los países a cumplir el Pacto de Estabilidad para garantizar la fortaleza de la moneda única.
Zapatero se mostró convencido de que las dificultades griegas "se pueden salvar con el respeto y el cumplimiento" de ese Pacto y Merkel garantizó que se acompañará a Grecia en ese camino, pero estimó que el objetivo de la estabilidad es una tarea que "debe resolver primero y antes que nada cada país por sí solo".
Grecia tiene que garantizar que presenta un programa con que el que realmente puede alcanzar los objetivos fijados porque "de ahí surge el respeto de los mercados", añadió Merkel.
En la misma línea, el jefe del Ejecutivo español consideró que el Pacto de estabilidad es una "regla fundamental" que "debe cumplirse", porque acompaña "de manera indisoluble" a la moneda única.
"Tras los grandes planes de estímulo y haber rescatado a los bancos, tenemos que volver a políticas presupuestarias serias, porque si no el euro sería atacable y sería un gran daño para todos", insistió Merkel.
A su juicio, el primer ministro griego, Giorgos Papandreu, es el primero que en mucho tiempo se está ocupando de este problema y sólo cuando los mercados otorguen buenas perspectivas a la economía griega el euro ganará solidez.
"Creo que Grecia lo puede conseguir", devolverá estabilidad a la eurozona y su "ambicioso" programa se convertirá en "la mejor manera de minimizar las reacciones al euro", manifestó.
Los dos mandatarios analizaron en su encuentro los ejes de la Estrategia 2020, que fijará este semestre los objetivos económicos y de empleo de la UE para la próxima década, y coincidieron en la necesidad de fijar "pocas" prioridades.
Zapatero destacó la importancia de la reunión entre la presidencia rotatoria de la UE y "el país más fuerte" de la Unión, que debe hacer una apuesta, dijo, por la productividad, la innovación, el talento y la investigación
En clave interna, Merkel ha instado a no debatir sobre si Alemania ha pagado un elevado precio en la zona euro en apoyo a otros Estados.
"Estamos viviendo una experiencia histórica única y sin precedente en el mundo con la moneda única y podemos sentirnos orgullosos", subrayó Merkel y añadió: "Es una etapa muy delicada, no debe haber debates sobre quién se ha beneficiado más; es nuestra moneda común y todos nos hemos beneficiado de ella".
Zapatero, que hoy ratificó en un periódico alemán que España rebajará su déficit público al 3 por ciento del PIB en 2013, se mostró convencido de que no era previsible que el mundo fuera a vivir la crisis más grave desde la Gran Depresión de los años 20 del siglo pasado.
A su juicio, la burbuja inmobiliaria existente en España cuando él llego al Gobierno, en 2004, habría sido "perfectamente asumible" sin esa crisis.
En la reunión analizaron también las próximas cumbres de la UE con América Latina y de la Unión por el Mediterráneo, que se celebrarán en España.
Merkel garantizó su apoyo a Zapatero y éste agradeció la implicación de Alemania en el proceso de dialogo con América Latina, "una muy buena noticia para España, la UE y Latinoamérica".
Destacó además los lazos económicos y comerciales que unen a los dos países.
El mayor número de importaciones españolas proceden de Alemania y este país es el segundo destino de las exportaciones, después de Francia.
La inversión alemana en España ronda 18.000 millones de euros y da empleo a 160.000 españoles, mientras que la inversión española en Alemania se sitúa en torno a 8.000 millones y emplea a unos 90.000 trabajadores.