Un grupo armado de Darfur ha asumido la autoría del secuestro de los cuatro surafricanos de la misión de paz conjunta de la ONU y de la Unión Africana en Darfur (UNAMID) y ha exigido el pago de un rescate y la excarcelación de varios de sus miembros a cambio de su liberación.

Ibrahim al Dukki, que en una conversación telefónica aseguró ser el portavoz del Movimiento de la Lucha y la Resistencia Popular de Darfur, un grupo desconocido, explicó que los cuatro rehenes (dos hombres y dos mujeres), se encontraban en buen estado de salud.

Los secuestrados estaban destinados en un campamento situado a 7 kilómetros de Nyala, capital de la provincia de Darfur del Sur, en el oeste de Sudán y fueron secuestrados el pasado domingo cuando regresaban a sus viviendas en un mismo vehículo.

Según Al Dukki, su grupo exige a la UNAMID el pago de un millón de libras sudanesas (400.000 dólares) y la excarcelación de los miembros de su grupo detenidos en Nyala.

Sin embargo, Al Dukki no especificó ni los nombres ni el número de personas cuya liberación han exigido.

Por su parte, el portavoz de la UNAMID Noureddine Mezni aseguró que hasta el momento, ni este ni ningún otro grupo se ha puesto en contacto con ellos.

Además, subrayó que la política de la UNAMID es la de no satisfacer el pago de ningún rescate y se negó a hacer más comentarios al respecto.

Horas antes, Mezdi había confirmado que los cuatro miembros de estas fuerzas internacionales de paz, que trabajaban como asesores policiales, habían sido secuestrados.

"Estamos haciendo todos los esfuerzos posibles en todos los frentes para dar con ellos sanos y salvos", dijo Mezni que insistió en que desconocían la identidad de los secuestradores.

La organización internacional ha creado un gabinete de crisis y está en permanente contacto con las autoridades sudanesas, que, según puntualizó, Mezni tienen la responsabilidad de asegurar la integridad del personal de esta misión internacional de paz.

Desde que fue establecida esta misión de paz conjunta, a comienzos del 2008, han muerto más de veinte efectivos de UNAMID, una unidad integrada por 16.852 militares y 4.675 policías, según el último dato, de febrero pasado.

La guerra de Darfur, que estalló en el 2003, ha causado ya unos 300.000 muertos y ha obligado a 2,7 millones de personas a abandonar sus comunidades de origen, según datos de la ONU.