El jefe de la misión europea "Atalanta" contra la piratería en Somalia, Peter Hudson, aseguró hoy que en los últimos meses se han triplicado las detenciones de sospechosos de esa actividad en el océano Índico, pero lamentó que la mayoría fueran liberados sin pasar por los tribunales.

"Lamentablemente, como no tenemos muchas vías para procesarlos, que es lo que nos gustaría, el recurso que nos queda es destruir la mayor parte de su material", explicó en una conferencia de prensa en Naciones Unidas el contraalmirante británico.

Según sus cálculos, las fuerzas navales europeas han desarticulado en los últimos tres meses 60 grupos piratas y practicado unos 400 arrestos, unas cifras "tres veces superiores a las del año pasado".

"En esta temporada, entre febrero y mayo, hemos visto un aumento enorme del número de embarcaciones que salieron a la mar para llevar a cabo actos de piratería" en las aguas del Índico, valoró.

Al mismo tiempo, resaltó que sólo 40 de los cerca de 400 sospechosos arrestados en los últimos tres meses se encuentran en la actualidad a la espera de juicio.

Hudson reconoció que este reducido número de procesamientos es "frustrante", ya que "da a un cierto aire de impunidad".

Por otro lado, el responsable de la operación "Atalanta" se mostró más optimista en relación a los resultados obtenidos en el sector del golfo de Adén, que es la arteria marítima por la que pasa el tráfico desde el canal de Suéz hacia el golfo Pérsico y Asia.

Para el marino, la situación ha cambiado sustancialmente desde el despliegue de la fuerza naval europea en diciembre de 2008, en la que nueve países participan con navíos en la actualidad.

"El número de ataques se ha reducido considerablemente, de unos veinte al mes, a cuatro o cinco, y el número de buques secuestrados se ha reducido considerablemente en la zona del Golfo de Adén", afirmó.

Asimismo, explicó que el 30 por ciento de los navíos bajo su mando escoltan los convoyes con cargamentos del Programa Mundial de Alimentos (PMA) y con pertrechos para la misión de paz de la Unión Africana en Somalia (AMISOM).

Hudson visitó hoy la sede de Naciones Unidas para asistir a una reunión informal de la Asamblea General dedicada a la amenaza que supone la piratería para la paz y la seguridad internacional.

En ese encuentro, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, avisó de que "la piratería está muy presente entre nosotros y en algunas partes del mundo está resurgiendo".

Para demostrarlo, indicó que en 2009 se produjeron 406 ataques piratas en el mundo, unos 100 más que en el año anterior, según la Organización Marítima Internacional (OMI).

"Estas cifras son alarmantes. Tenemos que examinar qué funciona, y qué se debe mejorar", indicó el máximo responsable de la ONU.

Al respecto, observó que se debe estrechar la cooperación internacional en este terreno y redoblar los esfuerzos para poner fin al interminable conflicto interno somalí, del que se benefician las organizaciones criminales.

Por eso la comunidad internacional estudiará cambiar de estrategia en Somalia en la conferencia de Estambul del próximo 21 de mayo organizada por el Gobierno turco, subrayó.

Por otra parte, también destacó la importancia de enjuiciar a los responsables de los ataques piratas, en lugar de "dejarlos ir o dejarlos morir".

Ban recordó que el Consejo de Seguridad le encargó recientemente un informe sobre alternativas para procesar a estos sospechosos, entre las que se encuentran la creación de un tribunal especial.