La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, anunció hoy en Seúl nuevas sanciones contra Corea del Norte, cuyas relaciones con Corea del Sur empeoraron tras el hundimiento de la corbeta surcoreana "Cheonan" en marzo.

Clinton señaló que Washington estudia congelar los bienes de bancos o individuos que realicen actividades vinculadas con la proliferación nuclear, además de restringir los movimientos de los diplomáticos norcoreanos.

La secretaria norteamericana de Estado hizo estas declaraciones en una rueda de prensa tras reunirse con su homólogo surcoreano, Yu Myung-hwan, y los ministros de Defensa de EEUU y Corea del Sur.

Según Clinton, el asesor de EEUU para la no proliferación nuclear viajará "pronto" a la región para abrir consultas con Corea del Sur y otros aliados sobre la aplicación de las sanciones que, insistió, estarán enfocadas contra la cúpula norcoreana y sus bienes.

El objetivo es "desestabilizar" las políticas del régimen comunista de Pyongyang, señaló la secretaria de Estado estadounidense, que instó a Corea del Norte a cesar sus acciones "de provocación".

También le urgió a dar pasos "irreversibles" para cumplir sus compromisos de desnuclearización, como condición imprescindible para un eventual levantamiento de las sanciones.

Recordó, además, que Washington mantiene tres líneas estratégicas contra Corea del Norte: esfuerzos diplomáticos con países aliados, refuerzo de la alianza con Corea del Sur y presión contra la cúpula norcoreana.

Clinton y el secretario de Defensa de EEUU, Robert Gates, se reunieron en Seúl con sus homólogos surcoreanos, Yu Myung-hwan y Kim Tae-Young, en un diálogo "2" celebrado con motivo del 60 aniversario del inicio de la Guerra de Corea (1950-1953).

Tras la reunión, los ministros emitieron un comunicado en el que advirtieron hoy a Corea del Norte de que cualquier comportamiento "irresponsable" tendrá "serias consecuencias", al tiempo que le instaron a poner fin "a todos sus programas nucleares".