El consejero ejecutivo de BP, Tony Hayward, se consideró hoy "vilipendiado" y "demonizado" tras el derrame de crudo en el golfo de México, que le obligará a dejar la compañía en octubre.

BP confirmó hoy en un comunicado que Hayward, muy criticado a raíz de su gestión ante la crisis originada por el vertido de petróleo en el golfo de México el pasado abril, dejará la empresa el próximo 1 de octubre.

Hayward, de 53 años, será sustituido por el estadounidense Bob Dudley, actualmente a cargo de las operaciones de limpieza de BP en el golfo.

El consejero delegado saliente dijo hoy a los medios británicos que se ha sentido "vilipendiado" y "demonizado" por el accidente de la plataforma "Deepwater Horizon", ocurrido el pasado 20 de abril en aguas del golfo de México.

Hayward aseguró que no sentía grandes pesares acerca de cómo había gestionado su liderazgo al frente del grupo, donde fue nombrado consejero delegado en el 2007, y apuntó que la decisión de dejar su cargo obedecía a motivos puramente prácticos.

"Hoy es un día muy triste para mí a nivel personal. No se trata de si es algo justo o injusto. Yo me convertí en la cara pública (del desastre) y se me demonizó y vilipendió por ello. BP no puede continuar avanzando en los EEUU conmigo como líder... La vida no es justa", señaló Hayward.

El directivo, que asumirá un cargo no ejecutivo en la junta directiva de la petrolera rusa TNK-BP, un negocio conjunto con la compañía británica, añadió que "a veces, cuando te sales de la acera, te atropella un autobús".

Las declaraciones de este directivo se producen el mismo día en que la petrolera anunció hoy unas pérdidas financieras cifradas en 17.000 millones de dólares en el segundo trimestre de este año, uno de los peores resultados financieros de la historia empresarial del Reino Unido.

En una nota, BP atribuyó esos resultados a los 32.200 millones de dólares (24.770 millones de euros) en costes para afrontar la limpieza del vertido en el golfo de México.